Opinión

¿Dónde quedaron 61 mil millones de pesos para atender daños de Otis?

El gobierno federal se ha ensañado con los guerrerenses, no alertó a tiempo a la población sobre la llegada del huracán Otis

Que en la Cámara de Diputados los legisladores de Morena hayan aprobado el Presupuesto de Egresos de la Federación para 2024 sin dinero para los guerrerenses es la muestra más ruin de Morena. ¿Dónde quedaron esos 61 mil millones de pesos que se comprometieron a asignar para atender los daños de Otis? Porque la realidad es que no etiquetaron recursos para tal fin.

Los diputados de oposición propusieron que los excedentes petroleros fueran utilizados para ayudar a Guerrero, pero ninguna de sus propuestas pasó. En Morena siguen aferrados con quitarle a los trabajadores del Poder Judicial el dinero de sus ahorros, porque solo aprobaron una reserva que pedía que los recursos de los fideicomisos de ese poder de la Unión se fueran para Guerrero. En su servilismo ciego, rechazaron todas las propuestas para crear un fondo especial para Guerrero, incluso las que provenían de su propio partido.

Tres días tardaron los diputados federales en aprobar el Presupuesto de Egresos. Esa discusión debió ser para darles más dinero a los guerrerenses para que puedan tener comida, agua, luz, un techo en el cual pasar la noche.

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Tenían que estar a la altura de las circunstancias y, sin ideologías o colores partidistas, buscar lo mejor para quienes hoy lo han perdido todo. Sin embargo, Morena traicionó a los mexicanos. Ahí está el compromiso que tienen los legisladores del régimen solo con su patrón, López Obrador, y no con los mexicanos.

En los últimos días, el gobierno federal se ha ensañado con los guerrerenses. No alertó a tiempo a la población sobre la llegada del huracán Otis y, lamentablemente, tampoco hay un proyecto integral para la reconstrucción del puerto de Acapulco y de los municipios aledaños.

Morena ha dicho que no hay dinero para comprar medicinas. Tampoco hay recursos para combatir la inseguridad. Es más, desmantelaron el Fonden que servía para atender las catástrofes naturales.

En resumen, el régimen en turno no asigna presupuesto para lo importante, pero sí para los caprichos presidenciales como la refinería de Dos Bocas que a la fecha no ha dado un solo barril de petróleo.


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