Durante esta administración ha habido avances muy importantes en materia laboral. En principio, en materia de justicia se transformaron radicalmente las relaciones de trabajo para evitar los abusos que se cometían a través de un sistema de contratación que vulneraba los derechos de las personas, así como se aumentaron en términos reales los salarios mínimos como hacía muchas décadas no sucedía.
Estas solo son algunas de las reformas que se han promovido y que han logrado crear un ambiente laboral más adecuado a nuestro modelo económico, pero sobre todo más equitativo.
Con ese mismo propósito, se propuso disminuir, desde la ley, las jornadas de trabajo semanal para pasar de 48 a 40 horas como sucede en diversas partes del mundo. Esta situación ya opera en muchas empresas privadas y en el sector público.
Sin embargo, como es natural existen resistencias al cambio con distintos argumentos. Al ser una reforma tan importante se requiere el diálogo más amplio entre todos los involucrados.
En especial, es necesario que los empleadores y las organizaciones que representan a los trabajadores encuentren, junto con los legisladores y el gobierno, la mejor solución para establecer en nuestro país las condiciones laborales más justas, al tiempo de que no se afecte la productividad de la economía nacional.
Sin duda se han expresado en parlamentos abiertos y foros de análisis distintos puntos de vista que es necesario conciliar, pero la decisión final que se tome debe estar sustentada en razonamientos cuidadosos y profundos, más allá de presiones.
En el poder legislativo se está trabajo en ese sentido. Se realiza un gran esfuerzo para escuchar a todos quienes tienen algo que aportar para llegar a un acuerdo en beneficio tanto de unos como de otros.
El Congreso actuará con absoluta responsabilidad y seguiremos construyendo las condiciones necesarias para que las personas trabajadoras tengan acceso a una vida laboral más digna que les permita un desarrollo personal más armónico y que nos lleve a una sociedad con más igualdad y justicia.