Las elecciones presidenciales de Venezuela, celebradas el pasado 28 de julio de 2024, evidenciaron una vez más a la dictadura encabezada por Maduro. A pesar de las denuncias de fraude y las pruebas que demostraron una clara y contundente victoria de Edmundo González, quien obtuvo el 67% de los votos, el Consejo Nacional Electoral proclamó a Maduro como vencedor.
En lugar de respetar la voluntad ciudadana, el régimen intensificó su aparato represivo, dejando en evidencia un absoluto desprecio por la democracia y el Estado de derecho.
Tras las elecciones, miles de ciudadanos se han convertido en presos políticos, y diversas organizaciones de derechos humanos han denunciado un aumento significativo en las prácticas represivas del régimen, que incluyen torturas, desapariciones forzadas, secuestros y persecuciones, especialmente contra la oposición.
Según informes de Human Rights Watch y otras fuentes, estas acciones forman parte de una estrategia sistemática para silenciar las voces críticas. Entre los métodos denunciados destacan detenciones arbitrarias, condiciones inhumanas de encarcelamiento y desapariciones de ciudadanos, cuyos familiares enfrentan el silencio del régimen sobre su paradero.
Desde la comunidad internacional, hemos expresado nuestra preocupación por el uso sistemático de la tortura como herramienta de intimidación y obtención de confesiones.
Entre las prácticas documentadas se encuentran golpizas, privación de sueño y simulacros de ejecución, claros ejemplos de un sistema que prioriza el control autoritario sobre los derechos humanos y la justicia.
El Presidente Electo de Venezuela es Edmundo González y debe asumir la presidencia el 10 de enero de 2025. Sin embargo, el régimen de Maduro ha desplegado una maquinaria represiva para impedirlo, forzando a González a exiliarse en España en septiembre de 2024.
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El régimen incluso ofreció una recompensa de 100 mil dólares por su captura, un acto que no solo es un ataque directo contra los principios democráticos, sino que evidencia el terror del régimen que tambalea ante la posibilidad de perder el poder. Están a nada de pagar por los crímenes de lesa humanidad cometidos y por todas las injusticias llevadas a cabo en contra de inocentes.
El contexto post-electoral ha agravado la ya crítica situación de derechos humanos en el país, dejando a opositores y ciudadanos vulnerables ante la violencia del régimen. A pesar de los llamados de la comunidad internacional para que cesen la represión y se respeten las garantías democráticas, el régimen ha respondido con una mayor radicalización. El chavismo no solo rechaza los resultados, sino que ignora descaradamente la soberanía popular.
Una vez más, México se coloca del lado incorrecto de la historia ya que el respaldo incondicional de Claudia Sheinbaum al régimen de Maduro resulta vergonzoso y profundamente irresponsable.
En lugar de mostrar solidaridad con el pueblo venezolano, México enviará una representación oficial el próximo 10 de enero, otorgando legitimidad a un régimen que viola sistemáticamente los derechos humanos y destruye las instituciones democráticas. Este apoyo no solo traiciona la tradición mexicana de solidaridad, sino que agrava el sufrimiento de millones de venezolanos.
La lucha de Edmundo González y María Corina Machado encarna la esperanza de un cambio para Venezuela. Ambos representan la valentía y el compromiso con la libertad y la democracia frente a un régimen dispuesto a utilizar cualquier medio para perpetuarse en el poder. Su esfuerzo trasciende las fronteras de Venezuela y se convierte en un símbolo de la lucha por la libertad en toda América Latina ye el mundo.
María Corina, realizó un enérgico llamado para el próximo 9 de enero invitando a los ciudadanos a movilizarse con determinación: “Somos todos o somos todos. Aquí nadie se queda atrás. Salgamos llenos de confianza.
Paralizados no logramos el cambio”. Advirtió que Maduro no abandonará el poder de manera voluntaria, afirmando: “Maduro no se va a ir solo, hay que hacerlo salir con la fuerza de un pueblo que no se rinde jamás”.
“Hay que hacerles entender que hasta aquí llegaron, que esto se acabó. No hay excusas, no hay mañana si no luchamos hoy. La libertad se alcanza cuando vencemos el miedo. Yo voy contigo. Llegó la hora de abrazarnos en todas las calles de Venezuela. Gloria al Bravo Pueblo”.
¡Este 9 de enero, todos a las calles, en Venezuela y el mundo!
El próximo 10 de enero no es solo una fecha simbólica, sino un momento decisivo para la historia de Venezuela. Ese día, millones de venezolanos esperan ver a su presidente legítimamente electo asumir el liderazgo del país a pesar de que el régimen ha hecho todo lo posible por bloquear este camino, reafirmando su naturaleza autoritaria. Al tiempo…
DETALLES. El aplazamiento del fallo de la licitación consolidada de medicamentos e insumos médicos 2025-2026, a cargo de Birmex, evidencia las consecuencias de la ignorancia y la corrupción en el gobierno. La falta de claridad en los procesos, exclusión arbitraria de empresas y decisiones logísticas poco prácticas reflejan un manejo ineficiente que afecta tanto a las compañías participantes como al sistema de salud en general. ¡CORRUPTOS!