Si quieres probar algo nuevo con combinaciones exóticas, te invitamos a darte una vuelta por Polanco, ahí en una de sus esquinas, seguramente verás estacionada una clásica pickups Chevrolet amarilla que da la bienvenida a todos los comensales de Fairchild 1869, un restaurante que te invita a descubrir nuevas sensaciones de sabores gracias a su tropical food.
Pero antes de detallarte lo que degustarás en este lugar, debes saber que su nombre hace un homenaje al legendario explorador botánico y gastronómico de finales del siglo XIX, David Fairchild, quien introdujo a Estados Unidos, en la década de 1890, los aguacates, mangos, uvas sin semillas y miles de alimentos que cambiaron y pusieron sabor a la dieta estadounidense.
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Inspirados en dichas experiencias, es que surge esta primera casa botánica que ofrece a sus visitantes un menú que mezcla ingredientes herbales con creativas recetas que se convierten en un deleite para el paladar.
Si bien, Fairchild ha ganado fama gracias a sus cócteles también lo está haciendo por su brunch que ha conquistado a cientos de visitantes que cada fin de semana llenan las mesas para saborear sus exquisitos chilaquiles de cacahuate.
Sin embargo es un lugar al que puedes acudir también por la tarde o noche, ya que su menú se complementa también con una variada carta para todos los gustos.
La recomendación es que si llegas con un grupo de amigos lo ideal es pedir al centro de la mesa la estrella de las entradas: el guacamole rústico acompañado de chicharrón de tapioca y bañado en tinta de calamar, que puedes complementar con el carpaccio de res y los esquites de camarón; creaciones que sólo serán la antesala para los platillos que vendrán.
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Para degustar
Su exquisita decoración, de luces tenues y ambiente relajado, dan lugar a seguir la sobremesa y a continuar con este viaje culinario donde no debes irte sin probar los tacos de jaiba cocinado con tempura de chilmole y pico de gallo o las tostadas de pulpo zarandeado, hecho al ajillo con naranja y aguacate asado con brotes orgánicos, los cuales te darán una idea del concepto gastronómico que maneja este lugar y la creatividad con la que su chef Misael Martínez elabora cada platillo.
Dicha experiencia no estaría completa sin su denominada coctelería botánica, a cargo del mixólogo Gustavo del Pozo que mezcla especias, ingredientes y mezcladores que dan un toque espectacular a su mixología convirtiendo sus drinks en bebidas únicas.
Así que para acompañar cada plato te sugerimos empezar con su clásico cóctel David Fairchild o un Mexican Sunset con jugo de piña, angostura, miel de agave y limón verde. Y mientras los pruebas déjate asombrar por su risotto de hongos o un menú más ligero como una ensalada de vegetales rostizados del huerto o un mix de lechugas con queso azul.
Cierra esta alquimia con uno de sus tragos más famosos: el Alebrije hecho con tequila, jarabe de perejil, jugo de limón, agua quina, cresta de sal de jamaica con morita y sal de pepita, así concluirás este paseo gastronómico que te invitará a seguir probando más cosas en otras ocasiones.
Otra sucursal
En tan sólo dos años, Fairchild ha puesto su sello en la esquina de Galileo #27 y sigue creciendo. Gracias a la aceptación que han tenido, esperan la apertura de su filial en la colonia Roma para el mes de agosto donde fusionarán el estilo de vida de dicha zona con su cocina tropical, no dejando de lado su concepto que lo ha colocado en una parada obligatoria que atrae a los foodies más exigentes.
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Sobre David Fairchild
Fue un aventurero-botánico que creció en Kansas, en un momento en que Estados Unidos estaba muy en blanco y necesitaba de mucho crecimiento económico, militar y culinario.
Él detectó un apetito por todo ese tipo de cambios, lo que lo llevó a emprender aventuras por todo el mundo. Fue a lugares poco visitados, en busca de alimentos y cultivos que enriquecerían a los agricultores y deleitarían mucho a los comedores estadounidenses.
Si pensamos en lo que hay en los supermercados, en cuestión de alimentos como plátanos, mangos, peras y piñas, estas son cosas que vinieron del extranjero. Y en gran parte fueron traídos por Fairchild y la gente que vino después de él.
