La comida asiática ha logrado posicionarse bien en nuestro país y, por supuesto en el mundo, debido a la abundancia de pescado, pollo, cerdo, arroz y verduras que sirven como base para potenciar los sabores dulce, salado, amargo, ácido y picante que, con la mezcla correcta, casi siempre se transforman en sensaciones explosivas para el paladar.
¿Qué es comida Chuka?
Una de estas variantes de la cocina del lejano oriente es la comida chuka, cuyo origen se remonta a mediados del siglo XIX, cuando el puerto de Yokohama, Japón, se abrió al comercio exterior y comenzó a recibir a migrantes chinos que formaron algunos asentamientos.
La unión de las culturas japonesa y china floreció cuando los migrantes chinos adaptaron su gastronomía a la cultura local. En esas primeras cocinas, la comida china se mezcló con el estilo de preparación japonés para crear nuevos sabores y, principalmente, nuevas formas de elaborar los platillos tradicionales.
Sirva esta introducción para entender el concepto y adentrarse en el particular estilo de la propuesta culinaria de Lazy Susan, un restaurante no muy grande, pero con el suficiente espacio para la convivencia por su enorme cocina abierta y una barra alrededor de ella que invita a la plática, mientras se preparan los alimentos, además de un saloncito y el área de bar.
La experiencia gastronómica
En su carta se pueden encontrar platillos orientales únicos elaborados con insumos frescos importados directamente de China, preparados al estilo japonés y con los sellos del aclamado chef Edo Kobayashi: rigor en la técnica, la más alta calidad de ingredientes y atención al más mínimo detalle.
Láminas de pescado blanco selladas con aceite de ajonjolí, soya preparada que se le agrega cacahuate confitado y cebollín es lo primero que llega a la mesa para paliar un poco el hambre, luego de un ajetreado día de trabajo, que enseguida aviva las papilas gustativas, anticipando un festín.
Acto seguido, llega un plato de Gyozas, que normalmente se sirven fritas, pero aquí son cocidas al vapor y se sazonan en la plancha, estas vienen rellenas de pancetta molida de cerdo, vegetales y salsa de ostión, que les confiere un sabor muy delicioso.
Un platillo que sorprende es el Ban Ban Ji, el cual consiste en tiras de pollo de cocción lenta , medusa encurtida, pepino, zanahoria y jitomate bañado en una pasta de ajonjolí con aceite rayu. La manera en que se sugiere comer es no mezclar los ingredientes, sino tomar un bocado de cada uno de ellos para disfrutarlo mejor. No hay duda, es un plato obligado de probar por las sensaciones de sabores tan diferentes que provee a cada bocado.
La Oreja de cerdo (es un hongo, llamado así porque tiene esa forma) es el siguiente plato y se prepara con una ensaladilla de cacahuate, ajo, chiles secos, oreja de cerdo, cebollín con aderezo de soya y aceite de ajonjolí, opcionalmente se le puede agregar una salsa picante, al estilo salsa macha para acompañarlo.
No se puede dejar de pedir los arroces y el ramen, que también se disfrutan mucho por su preparación, aunque es momento de ya no pedir más porque el estómago se encuentra a punto de reventar, probando más por gula, que por hambre las exquisiteces que esta “perezosa” Susan prepara para sus comensales.
El responsable del sabor
Los platillos están a cargo del chef Shigetoshi “Toshi” Narita, colaborador de Edo Kobayashi casi desde sus inicios. Nacido en Yokohama, Japón, Toshi aprendió a cocinar en el restaurante de su padre y con el tiempo se especializó en la cocina tradicional japonesa. Llegó a México en 2014 para supervisar Rokai y se maravilló con la mezcla de ingredientes y sabores que abundan en el país.
Por supuesto, un sitio como este no puede dejar de ofrecer sakes, destilados, cocteles, cervezas y demás para complementar los diversos platillos que componen su amplia carta. Un vino bastante recomendable para maridar varios platillos es el Can Sumoi La Rosa, de equilibrado sabor por ser elaborado bajo los principios de la agricultura biodinámica.
Lazy Susan es acogedor, es comida que conforta el alma, es descubrimiento, es disfrutar de nuevos sabores de esta cocina fusión de Japón y China que se traduce en una experiencia culinaria difícil de olvidar y que invita a volver una y otra vez.
Lazy Susan
Río Pánuco 132, planta alta, Cuauhtémoc
Horario: lunes a sábado, de 13 a 23 horas
Reservaciones (Whatsapp) 56 3035 4220 y a través de OpenTable
Instagram @lazysusan.mx