En los último años, el Príncipe Harry (nieto de la fallecida Reina Isabel II e hijo de la Princesa Diana) y su esposa Meghan Markle, han estado en el ojo del huracán mediático, desde la renuncia del título y privilegios nobiliairios de Harry en 2020. A partir de este suceso, las quejas, comentarios racistas y hasta amenazas de muerte hacia la pareja inglesa se han visto constantemente, y este año, a través del documental de Netflix “Harry & Meghan”, han podido expresar su lado de la historia, resguardados en su mansión Montecito Mansion, en Estados Unidos.
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En esta residencia, donde grabaron la mayor parte del documental, está valuada en el mercado de bienes raíces en 33.5 millones de dólares. A medida para la realeza, con un estilo arquitectónico Mediterráneo, seis habitaciones completas, de más de 13 mil metros cuadrados de construcción, viene con una vista espectacular hacia el mar y las montañas de California; cuenta con múltiples terrazas para observar el atardecer, y un gran salón con un candelabro clásico y ventanas con marcos de arco, lugar donde Meghan y Harry fueron entrevistados principalmente.
Esta residencia cuenta con un inmenso jardín de dos hectáreas, con corredores románticos rodeados de flores y rosas; enormes palmeras que dan sombra ante el intenso calor de California, además, está pensado para ser un hogar sustentable, con un campo de vegetales y frutas, varios naranjos y limoneros. Las amenidades incluyen: alberca, jacuzzi, bar, gimnasio, cuarto de juego y teatro en casa.
El Duque y la Duquesa de Sussex se movieron a Montecito Mansion en 2020, después de la polémica decisión que tomó Harry de dejar a la familia real por el amor de su vida, Meghan Markle. Vivieron antes unos meses en la mansión de Tyler Perry para después poder adquirir la suya en 14.7 millones de dólares.
Montecito ha sido el lugar predicelcto de muchas figuras públicas y celébridades desde hace ya varios años, siendo el lugar ideal para la luna de miel del expresidente de los Estados Unidos, John F. Kennedy y su esposa Jacqueline Kennedy en 1953. Posteriormente atrajo la atención de varias estrellas de Hollywood y Los Ángeles como Oprah Winfrey, Gwyneth Paltrow y Kim Kardashian.
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