La noticia del estado de salud periodista Jorge Berry conmocionó al país, el comunicador fue hospitalizado en Puerto Vallarta con diagnóstico de muerte cerebral, por lo que fue conectado a aparatos médicos para mantenerlo con vida artificial, a la espera de que sus hijos lleguen desde España para que juntos le den el último adiós.
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Pero ¿qué es esta condición de muerte cerebral y cuál es la diferencia con el estado de coma?
La muerte cerebral, también conocida como muerte por criterios neurológicos, implica la ausencia permanente y completa de la función cerebral humana, el diagnóstico de esta condición se lleva a cabo por médicos especializados en evaluación de muerte cerebral en unidades de cuidados intensivos.
Según información de portales especializados en materia de salud, el diagnóstico de muerte cerebral requiere la presencia de tres condiciones fundamentales: coma persistente, ausencia de reflejos del tronco encefálico y falta de capacidad para respirar de forma independiente.
En el primer caso, el coma se confirma cuando no hay respuesta ocular, verbal ni de movimientos ante estímulos dolorosos en un paciente.
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La evaluación de la función del tronco encefálico se realiza mediante pruebas que incluyen la respuesta pupilar a la luz, así como la capacidad de toser o tener arcadas en respuesta a la estimulación de la garganta.
Si se confirma el coma y la ausencia de reflejos del tronco encefálico, se procede a una prueba de apnea en la que se retira temporalmente la respiración mecánica para observar si hay respiración espontánea.
Si después de 10 minutos no se observa respiración espontánea y los niveles de dióxido de carbono en sangre aumentan en 20 milímetros de mercurio o más, se cumplen los criterios de muerte cerebral.
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Consecuencias y consideraciones en la muerte cerebral
Una vez que se diagnostica la muerte cerebral, se declara al paciente como fallecido.
En situaciones de donación de órganos o cuando una paciente embarazada es diagnosticada con muerte cerebral y se toma la decisión de mantener el soporte vital para sustentar al feto, es posible continuar con el soporte de órganos, incluyendo la ventilación mecánica y medicamentos para mantener una presión arterial adecuada.
Muerte cerebral y otros estados de inconsciencia
Es importante destacar las diferencias entre la muerte cerebral y otros estados de inconsciencia. El coma puede compararse con un estado de sueño profundo en el que el cerebro no responde a estímulos externos, pero la persona sigue viva y puede recuperarse.
Por otro lado, la muerte cerebral a menudo se confunde con un estado vegetativo persistente, pero son condiciones distintas.
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En el estado vegetativo persistente, las funciones cerebrales superiores están perdidas, pero las funciones esenciales como la frecuencia cardíaca y la respiración continúan. Sin embargo, en la muerte cerebral, la persona ha fallecido.
Decisión y donación
En los casos de muerte cerebral, las máquinas de soporte vital mantienen la respiración y el ritmo cardíaco de la persona. Sin embargo, la muerte cerebral es definitiva y no hay posibilidad de recuperar la conciencia.
En ciertos casos, las personas con muerte cerebral pueden ser candidatas para la donación de órganos. En estas situaciones, se mantiene la ventilación mecánica y se administran medicamentos para preservar los órganos internos.
Después de la extracción de los órganos válidos, se desconecta la ventilación y se pueden llevar a cabo los arreglos funerarios.
