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Mitos de la pastilla del día siguiente que debes saber

La pastilla del día siguiente es uno de los medios anticonceptivos que está rodeada de más mitos y dudas al rededor de su funcionamiento y sus efectos

Con todos los mitos que rodean al método anticonceptivo de la pastilla de emergencia, las dudas y desinformación suelen rondar las redes sociales.

Para aclarar las dudas y develar los mitos más comunes de este método hablamos con Matías Sepúlveda, coordinador de consultorios DKT, ONG que brinda a las parejas opciones accesibles y seguras para la anticoncepción y la prevención de enfermedades de transmisión sexual.

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¿Cómo funciona realmente?

Muchas dudas surgen alrededor del método de funcionamiento de la pastilla del día siguiente. La realidad es que el ingrediente principal es la progesterona, este es una hormona completamente normal en el ciclo menstrual de las mujeres.

De hecho, esta hormona se presenta en la segunda parte del ciclo y es la encargada de mantener un embarazo. La pastilla tiene como objetivo retrasar la ovulación. De esta manera, al detenerla temporalmente, el espermatozoide no tiene nada que fecundar y se evita el embarazo. Esto hace que sea normal que exista un retraso después de consumirla, este ronda entre los dos a doce días.

No es abortiva


Aunque en muchas culturas y regiones, se le llegó a considerar como un pastilla abortiva, la realidad es completamente diferente.

El doctor Sepúlveda remarca el hecho de que la hormona que compone la pastilla es de hecho, la responsable de mantener el embarazo. Incluso en caso de tomarla una vez que ya se dio la implantación del ovulo fecundado, estudios muestran que la píldora no afecta en nada al producto. Es por eso que se debe tomar hasta 72 horas después de un encuentro de riesgo.

Se puede usar más de tres veces al año

Durante mucho tiempo, se extendió el rumor de que este método anticonceptivo, solo podía ser empleado una limitada cantidad de veces durante el año. Ante estas preocupaciones la OMS realizó diversos estudios para ver qué podría pasar en caso de utilizarla varias veces al año y hasta repetidamente en un mismo ciclo menstrual.

Los resultados indican que no existe ninguna afectación a la fertilidad, ni representa un factor cancerígeno o de alguna otra patología relacionada.


Sepúlveda remarca que por ello es que es llamada “pastilla de emergencia” porque se puede usar cada vez que sea necesario.

No existe un límite superior de uso, además no se presentan problemas para consumar el embarazo en el ciclo consecuente al uso de la pastilla. Lo único a tener en cuenta, es que al retrasar la ovulación, usarla de manera constante representa una irregularidad en el ciclo.

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Precauciones al tomarla

Si bien, no existen condiciones que generen contraindicaciones con la pastilla del día siguiente, sí que se deben tener en cuenta un par de detalles. El especialista subrayó que los efectos secundarios más comunes son: mastalgia, cefalea y deshidratación. Además, el comprimido, como el de cualquier otra píldora, se encuentra mezclado con lactosa, por lo que algunas personas podrían sentir malestar estomacal.

En caso de que la mezcla de malestar y dolor llegue a provocar nauseas y esto lleve al vomito, la dosis puede repetirse. Esto solo en caso de haber vomitado a menos de dos horas de haber tomado la pastilla. En estos casos lo recomendable es tomar abundante agua, comer algo ligero y volver a tomar la pastilla.

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Descanso hormonal

Uno de los términos que llegaron a la idea de que sólo podía ser usada una limitada cantidad de veces fue el de “bomba hormonal”. Esto causaba que las usuarias necesitaran de un “descanso” de diversos métodos anticonceptivos.

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Sin embargo, el experto hizo hincapié en que con los años, todos los métodos hormonales han ido haciendo estudios de los efectos de la dosis de hormonas en sus medicamentos, y como resultado cada vez se ha reducido de manera exponencial.

Esto aplica a todos los métodos como las pastillas orales, los implantes o el DIU, con excepción de las inyecciones anticonceptivas, las cuales sí requieren de ese “descanso”.

Pese a que sigue existiendo un estigma rodeando a este método anticonceptivo, y ha formado parte de diversos discursos políticos y religiosos, la realidad es que es un método completamente seguro.

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Lo más importante es estar informado de todas las opciones que existen y estar completamente informado para tomar la decisión que mejor se acomode a las necesidades personales de cada quien.

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