Las bebidas alcohólicas presentan un pequeño inconveniente en lo que respecta a seguir la dieta y es que son altas en calorías. Una copa de vino pude ir desde 120 hasta 290 calorías dependiendo del tipo y la porción.
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Es por esto que la industria del vino, como la alimenticia en general, ha avanzado por aumentar la oferta de opciones bajas en calorías. Este tipo de vinos tienen como característica principal poseer sólo 65 calorías por copa (porción de 125 ml) y 8.5 grados de alcohol, pero manteniendo la calidad y las propiedades de cada cepa.
En los últimos años ha aumentado la preferencia por productos más ligeros y con menos alcohol, especialmente entre jóvenes y mujeres, siendo la moderación y la salud las principales razones.
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Retos y beneficios
Este tipo de innovación no es fácil y representa un reto técnico para su producción. Max Weinlaub, enólogo de Casillero del Diablo afirma que “Buscamos principalmente uvas de zonas donde estas variedades maduran más temprano, lo que nos permite conseguir uvas con menor nivel de azúcar y, por ende, un menor contenido alcohólico gracias a un proceso 100% natural”.
“Aunque hay un cambio en las preferencias, las personas aún quieren vivir experiencias en torno al consumo. Es por eso que Belight es una gran opción: una copa de Sauvignon Blanc normalmente contiene 89 calorías, nuestra nueva propuesta posee un 27% menos de calorías que una copa tradicional, sin perder las grandes características por las que esta compañía es conocida en todo el mundo”, indica Sebastián Aguirre, Gerente de Marketing.
Esta innovación baja en calorías ha conquistado exitosamente el mercado en Chile, México y Brasil, convirtiéndose en una gran opción para los consumidores que buscan un estilo de vida más consciente. Se trata de un Sauvignon Blanc y un Rosé que responden a la creciente tendencia mundial de productos bajos en calorías.
