Un nuevoo tequila de Grupo Campari, que sorprendió el año pasado con su primera botella de Blanco, ahora presenta Reposado, una expresión que combina siglos de tradición con innovación en el proceso, mientras respeta el sabor del corazón de la planta.
Estados Unidos, Alemania y España, que concentran más del 85% de las exportaciones del líquido con D.O., ya son testigos de cómo un sabor tan refinado puede conquistar hasta los paladares más exigentes.
Esta presentación lleva el legado del agave a un nivel superior con su proceso de doble barrica, un método único que combina el carácter terroso y especiado del roble europeo con las notas dulces y frescas del roble americano, creando una sinfonía de sabores que se despliegan lentamente con cada sorbo.
Esto no solo enriquece el perfil del tequila, sino que también resalta el compromiso de la marca con la excelencia y la innovación.
El tiempo como aliado del sabor
El arte del tequila es, en esencia, el arte de la paciencia. Para esta nueva expresión, Mayenda mantiene un proceso de Reposado Double Cask, envejeciendo el líquido durante seis meses para lograr una mezcla de sabores y encontrar el equilibrio natural.
Este sistema extendido permite que la bebida desarrolle una complejidad y profundidad que solo el tiempo puede ofrecer, sin prisas, solo con el deseo de alcanzar la perfección.
Jesús Susunaga, maestro tequilero de Mayenda, ha planteado el proceso de añejamiento como una mejora para esta nueva etiqueta, que mantiene el respeto y enaltece el sabor genuino del agave, como ya lo había logrado para el blanco.
Sin importar si este líquido reposó en una de las barricas europeas o americanas, cada gota se mezcla para lograr consistencia, sabor, textura y refinamiento. El proceso de unificación es un homenaje a la tradición, resultando en un tequila que no solo satisface, sino que también sorprende.
Las cualidades del líquido sobrepasan el mundo del gusto y se hacen presentes en lo táctil y visual, con la botella. Los decantadores de la marca están inspirados en el arte del vidrio jalisciense soplado a mano, como una muestra de la grandeza de la artesanía mexicana.
Las etiquetas son elaboradas 100 % con subproductos de agave recuperados, reflejando el compromiso con la sostenibilidad. Como toque final, todos los contenedores están adornados con un medallón de cobre, obra del joyero mexicano Mauricio Serrano, como un accesorio elegante y distinguido.
El ritual del disfrute
Tomarse un momento para disfrutar de este destilado es un ritual en sí mismo. Ya sea servido solo, en una copa tequilera que permita que sus aromas se desplieguen plenamente, o en cócteles que respetan su historia, es una experiencia para ser saboreada con calma.
Adicionalmente, por la versatilidad del producto, existen algunos cocteles fáciles que pueden replicarse en casa. Toma nota:
Morita Martini: Un giro contemporáneo a un clásico, donde el vermut infusionado con chile morita y un toque de sésamo y chile realzan las notas de Mayenda.
Paloma Premium: Una elevación del clásico mexicano, que con jugo de toronja fresco y una guarnición de esta misma fruta quemada, para evocar el proceso de cocción del agave.
