Ottawa, la capital de Canadá, es mucho más que una simple parada en el camino entre Toronto y Montreal.
Para los viajeros mexicanos, esta ciudad ofrece una experiencia cultural e histórica única, llena de actividades para todos los gustos.
Conversamos con Juan Pablo Suárez, Manager de Travel Trade de Ottawa Tourism, quien nos compartió valiosos consejos para aprovechar al máximo una visita a Ottawa.
Desde museos de renombre hasta una gastronomía internacional impresionante, Ottawa tiene algo especial que ofrecer a cada visitante.
¿Cómo se sienten acercándose por primera vez al mercado mexicano?
— Bien, porque hicimos todo un análisis sobre el mercado mexicano en Canadá y la verdad es que ha venido creciendo. Fue el primer mercado que se recuperó con buenos niveles después del COVID, y por eso decidimos dar más promoción de la ciudad de Ottawa para que los turistas se queden más tiempo. Normalmente, los tours que toman los mexicanos para venir al este de Canadá comienzan en Toronto y pasan por Ottawa solamente una noche, por lo que no les da tiempo de conocer toda la belleza de la región.
¿Es una zona que se ha considerado de paso por los mexicanos?
— Así es, geográficamente está situada entre Toronto y Montreal, y contra eso no podemos hacer nada, pero Ottawa tiene muchísimo que ofrecer. Al ser la capital de Canadá, hay un gran interés tanto en aspectos culturales como históricos para mostrar a cualquier tipo de viajero. Puede ser toda una oportunidad para conocer otro lado de Canadá.
¿Qué atractivos puedes recomendarle a los mexicanos para visitar en Ottawa?
— Hay de todo tipo y para todos los gustos. Hemos desarrollado estos productos tanto para una visita familiar como de amigos, parejas o con niñas y niños. Pueden conocer históricamente la ciudad, porque culturalmente tiene mucha importancia; cuenta con siete de los nueve museos nacionales del país.
Uno de ellos, que es el más conocido y visitado, es el Museo Canadiense de la Historia, donde también se encuentra el Museo de los Niños. Aquí te puedes dar cuenta realmente de toda la historia del país y de cómo Canadá se ha convertido en la potencia que es hoy en día. Para los más pequeños está el Museo de la Ciencia y la Tecnología.
Mi segunda recomendación es visitar los tres ríos y, específicamente, el canal Rideau. Este canal es la arteria que parte a la mitad la ciudad; gracias a su construcción, los primeros pobladores comenzaron a establecerse en la ciudad, como cuando llegaron los europeos.
Además, es uno de los patrimonios de la UNESCO. Es un lugar muy interesante históricamente, pero también hay muchas actividades como el alquiler de kayaks o canoas.
Hay un crucero que te da el paseo en una hora y media, esto es durante el verano y el otoño, pero en el invierno, por las bajas temperaturas, el canal se congela y se convierte en la pista de hielo más grande para patinar en el mundo. De hecho, tienen más de 8 km donde puedes patinar, y es una maravilla porque hay muchísimas actividades acuáticas durante el verano y también muchas actividades al aire libre durante el invierno.
A lo largo del canal hay unos caminos exclusivos para bicicletas y peatones donde ves a todo el mundo corriendo, caminando, paseando a su perro, etcétera. Entonces, hay muchísima vida alrededor del canal.
Otra recomendación es la visita al Mercado de ByWard. Es una de las zonas de comercio más grandes y antiguas de la región, y está en el centro. No solo la parte del mercado es hermosa, sino todo lo que lo rodea.
Lo magnífico de este lugar es la gastronomía, pues la comida de Canadá hay que entenderla como lo que es el país: un lugar que alberga muchos migrantes, por lo que hay cocina de todos los países concentrada aquí.
Hay muchísimos restaurantes de todo tipo, desde comida callejera donde comes de pie, hasta restaurantes muy finos donde tienes que hacer tu reservación. Te puedo apostar que hay comidas de más de 40 países; realmente esa es la riqueza que tiene este lugar, que puedes probar alimentos de todos lados. Y en la noche también tiene mucha vida porque hay bares y muchos pubs, entonces el área es muy interesante de visitar.
¿Y qué tal está la oferta hotelera para los mexicanos?
— Hay hoteles de todo tipo, opciones de cinco estrellas y más modestas. Las cadenas Marriott y Fairmont están muy presentes. También hay hoteles locales grandes; recomiendo mucho el Novotel, porque está a unas cuadras del ByWard Market, del parlamento y del canal Rideau.
Si quieren ahorrar un poco más en los hoteles, pueden alejarse un poco más del centro, que es la parte más cara de la ciudad, y quedarse en un hotel de tres estrellas, que puede ser un poco más económico.
¿Ottawa es ideal para disfrutarse en cualquier temporada?
— Sí, hay festivales durante todo el año que complementan la oferta turística. En el verano es cuando hay más festivales y actividades al aire libre.
Tenemos el festival de blues, jazz, el de comedia, el griego, también un Festival Latino, etcétera. En otoño, el cambio de hojas y el cambio de la naturaleza entre el calor y el frío produce una atmósfera fantástica, y se ofrecen festivales de música de cámara, etcétera.
Y en el invierno, justo cuando hace más frío, exactamente en febrero, se realiza un festival que se llama Winterlude. Se lleva a cabo durante tres fines de semana en febrero y, además de tener el canal para patinar, hay dos o tres parques donde instalan resbaladillas, toboganes, llantas para deslizarse, y lo más sorprendente es que levantan un muro de hielo donde la gente puede ir a ver las películas que se proyectan.
Al mismo tiempo, se realiza el Concurso Internacional de Figuras de Hielo.
¿Qué tan cara es Ottawa?
— Comparada con las otras dos ciudades más visitadas, Montreal y Toronto, Ottawa es la más barata de las tres, la más económica. Encontrarás de todo, quizás puedes ir a un restaurante más caro que en Toronto o en Montreal, pero la tarifa normal de un hotel de 4 estrellas siempre será más económica que en cualquiera de las dos ciudades.
Además, una ventaja que tiene es que muchas de las atracciones son gratuitas, por ejemplo, algunos museos tienen acceso gratuito a partir de las 5 de la tarde.
El Festival Winterlude es de libre acceso para todos. La entrada al parlamento también incluye una experiencia inmersiva que no tiene costo alguno. Hay muchas actividades para la familia o para parejas donde no tienen que pagar, lo que también te permite ampliar tu presupuesto. Y en la comida, como te digo, encontrarás todo tipo de opciones en la región: comida callejera o un food truck donde puedes gastar alrededor de 15 o 18 dólares, y en otro restaurante, por persona, puedes gastar 250 dólares.