Si bien los griegos son los principales difusores en la cultura de este fermentado lácteo, este alimento se remonta a mucho antes de esta civilización.
El hecho de que haya logrado sobrevivir tantos siglos se debe, aparte de su sabor extraordinario y único, a la gran cantidad de propiedades que le aportan a la flora intestinal.
A través de su proceso de fermentación se consigue agregar bacterias buenas, conocidas como probióticos, que ayudan a mejorar el sistema digestivo.
A diferencia de otros tipos, el yogur griego destaca por su proceso de elaboración único. La grasa para su elaboración debe ser de leche de vaca (butírica), lo que le otorga una alta cantidad de proteína.
Según la PROFECO (Procuraduría Federal del Consumidor), el yogur debe tener un mínimo de 10 millones de microorganismos vivos Streptococcus thermophilus y Lactobacillus delbrueckii, subespecie bulgaricus UFCg (Unidad Formadora de Colonia por gramo).
Este tipo de bacterias se consideran buenas y benéficas para nuestro cuerpo, ya que ayudan a descomponer los alimentos y protegen la barrera del estómago.
¿Cómo integrarlo en nuestra dieta?
Al ser un alimento ligero y lleno de propiedades, es fácil de incorporar en cualquier comida del día. Por su composición y sabor, se ha establecido como la base del desayuno de muchas personas alrededor del mundo.
Si bien puede consumirse solo, lo mejor es combinarlo con algún otro alimento para lograr una comida balanceada.
Los frutos rojos y algunos cereales suelen ser los preferidos, pues le otorgan una textura única y elevan su sabor lácteo.
Para hacer más accesible su inclusión en la dieta diaria de los mexicanos, el yogur griego Oikos ha lanzado su nueva presentación Oikos Toppings, el cual logra combinar su ya conocida textura suave y cremosa con un mix de complementos deliciosos para disfrutar en cualquier momento del día.
Ofrece más proteína que un yogur normal, además de que te aporta calcio y contiene fermentos lácticos que pueden ayudar a darle variedad a tu microbiota intestinal y mantener una salud digestiva adecuada.
Cada opción de topping ofrece ingredientes especialmente seleccionados para añadir un toque extra de sabor. Entre ellos están: un mix de frutos rojos, bits de chocolate y mini pretzels que se combinan en una mezcla ideal con el yogur, creando una explosión de sabores difícil de resistir.