“Si no nos apoyan, que nos dejen trabajar”. Es el llamado de músicos en Puebla a las autoridades para la apertura de espacios durante la pandemia.
En el marco del Día Internacional de la Música, Publimetro platicó con tres poblanos que hacen música y forman parte de la industria musical.
La pandemia los ha hecho coincidir: la paga es insuficiente y el mejor apoyo es la apertura de espacios.
Al no permitirse la música en vivo, ni eventos masivos por la emergencia sanitaria del Coronavirus, muchos de los artistas han tenido que buscar otras opciones de ingresos para sus bolsillos.
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Miztli Vega, lleva 12 años dedicándose a la música, actualmente es docente en la Escuela Superior de Música “Fausto de Andrés y Aguirre” y en la Universidad de Música Pacelli en Puebla, pero también tiene su estudio de producción musical.
Anteriormente vivía de los eventos en vivo, pero ahora solo recibe ingresos por las clases que ofrece, así como por la grabación y producción de conciertos virtuales.
Apuntó que las presentaciones en vivo son esenciales para generar más ingresos, aunque la paga ha ido en descenso, pues antes de pandemia se ganaban de 500 a mil pesos por músico, en un evento, cuando ahora ofrecen hasta 150 pesos.
“Veo difícil que se adopten los conciertos virtuales y transmisiones en vivo para ver a los músicos, dudo que el arte se quede en lo virtual, es una actividad que se tiene que vivir totalmente de manera presencial”.
— Miztli Vega, productor y músico.
Reapropiarse de los espacios como una alternativa
Denise Quirós, conocida como Deni Valo, es una cantante rapera desde hace ocho años, pero además es docente en la BUAP.
Ante las restricciones, ella resaltó la importancia de que la sociedad se reapropie de los espacios públicos para hacer difundir el arte y la cultura.
En días recientes, tuvo la oportunidad de participar en un evento en el Parque Biblioteca y consideró que este, al igual que otros espacios pueden ser utilizados para llevar entretenimiento a la gente.
“Es necesario el reconocimiento del trabajo por parte de la sociedad y de las instituciones. El arte salva vidas, es un motor para generar ambientes de paz y organización”.
— Deni Valo, cantante rapera.
Agregó que la pandemia traerá nuevas dinámicas de convivencia en los escenarios, pues cuando antes la gente podía desbordarse, bailar y cantar sin cubreboca, ahora las personas están sentadas y divididas, guardando su distancia.
“Al gobierno solo se le puede pedir que nos deje trabajar”
Ricardo Loranca y Campos es egresado de Comunicación y gestor de eventos musicales desde hace cinco años, para él los espectáculos vía streaming resultan poco eficaces para la escena local, ya que no se pueden monetizar y solo funciona para artistas consolidados y de renombre.
Aunque ya se han reactivado fechas en algunas salas de conciertos, consideró que no es suficiente, pues los organizadores viven con el temor de que las autoridades lleguen a suspender los eventos, aunque cuenten con las medidas sanitarias.
En contraste, resaltó, se ha permitido eventos masivos, como las campañas para las elecciones, así como el evento del gobernador Miguel Barbosa, por el 15 de septiembre, con más de mil personas.
“Paramos año y medio, si no fuera por los otros dos ingresos que tenía como periodista y como estudiante no sé qué hubiera hecho, muchos compañeros empezaron a hacer comida o agarraron el coche y se hicieron Uber”.
— Ricardo Loranca, gestor de eventos musicales.
Destacó que apoyar la industria musical no solo contempla al artista, sino quienes se involucran: ingenieros de sonido, camarógrafos, staff y meseros, lo cual genera una derrama económica importante.
