Transportistas, taxistas y algunos conductores particulares convocaron a una marcha este domingo para mostrar su rechazo al programa de verificación vehicular propuesto por el gobierno de Puebla.
Sin embargo, la convocatoria fue mínima y acudieron máximo 30 personas, por lo que pidieron mayor participación de las personas al argumentar que la verificación “es una llave para la extorsión” porque desperfectos físicos no tienen que ver con el cuidado del medio ambiente.
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Durante su posicionamiento, acusaron que el programa tiene un fin recaudatorio y afectará a la economía de los poblanos y también reclamaron por los parquímetros instalados por el Ayuntamiento de Puebla.
Por ello, los inconformes acudieron al Congreso de Puebla y al Palacio Municipal para presentar su pliego petitorio y pedir que velen por los intereses de la ciudadanía.
Por segunda vez en una semana los transportistas convocaron a una marcha para hacer visible su desacuerdo con la verificación, la primera vez llegaron a Casa Aguayo, pero al no sentirse conformes con la atención que les dieron autoridades estatales, convocaron nuevamente a la movilización de este domingo.
