La Fiscalía del Estado de Puebla (FGE) lanzó una alerta migratoria un día después de que circuló el video de los ‘mirreyes’ que golpearon a Ernesto Calderón en la zona de Angelópolis, pero hasta el momento se desconoce el paradero de los involucrados.
En rueda de prensa, el titular Gilberto Higuera Bernal explicó que desde el pasado 10 de septiembre se solicitó la colaboración de autoridades internacionales y fiscalías de otros estados de donde se ha tenido información de su posible localización.
“Vamos a buscar a las personas para presentarlos ante los jueces donde se encuentren (...) Advertimos migratoriamente desde el domingo pasado, y los vamos a encontrar donde estén, ese es nuestro trabajo (...) a una gran cantidad de ellos los aprehendemos fuera del estado”, declaró.
— Gilberto Higuera, fiscal del estado de Puebla
Actualizó que son siete los jóvenes involucrados en la golpiza, todos mayores de edad, y se confirmó que algunos son provenientes del estado de Hidalgo.
Solicitan alerta ante Policía Internacional
Aunque no se ha constatado si han salido del país, Gilberto Higuera informó que se pidió la alerta migratoria ante la Policía Internacional para asegurarse que no huyan a otro destino.
“No podemos dar nombres, es una investigación concluida y cuando eso pasa es que hay delitos acreditados y probables responsables identificados, siete, todos mayores de edad (…) déjenme no decirlos, pero van a ser dos (delitos)”, expresó.
El fiscal rechazó que no se estén dando resultados, pues dijo la investigación lleva 72 horas y se ha concluido, por lo que se está trabajando en la detención de los jóvenes involucrados.
“Para nosotros es llevar los casos ante los tribunales, que haya vinculación a proceso y sentencias condenatorias, no realizar investigaciones fallidas que por rápidas resulten infructuosas y generen injusticia”, expresó.
Ante ello, se dio a conocer que la autoridad ministerial lleva a cabo diversos cateos a inmuebles de la capital, entre estos uno de la 31 Poniente y 5 Sur, en la colonia La Ladrillera, presuntamente propiedad del papá de los gemelos Fran y Luis Romero Figueroa.