Los gemelos Luis y Francisco Romero Figueroa, permanecerán en prisión preventiva tras haberles imputado los delitos de lesiones y discriminación por la agresión en contra de Ernesto Calderón, en La Isla de Angelópolis, la madrugada del 10 de septiembre.
Este 26 de agosto se citó a los hermanos a las 15:00 horas en el Centro de Justicia Penal del Estado de Puebla, al sur de la capital poblana, para resolver su situación jurídica, luego de que ayer se entregaron de manera voluntaria en las instalaciones de la Fiscalía General del Estado.
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En audiencia inicial, la cual duró más de cuatro horas, la representación social dio a conocer al juez de causa los datos de prueba que aportó la fiscalía en la carpeta de investigación y solicitó la vinculación a proceso de los dos detenidos.
La abogada de Ernesto Calderón, Coral Zavaleta Bianchini informó a medios locales de comunicación, que tras la audiencia, los gemelos permanecerán en prisión, en el penal de San Miguel, durante dos meses mientras avanzan las investigaciones.
Los delitos que el Agente del Ministerio Público les imputó son lesiones calificadas en agravio de Neto Calderón y discriminación en agravio de Neto y sus amigos Susana y Maximiliano, a quienes llamaron “nacos”.
El grado de participación fue de coautores materiales y la jueza recalcó que actuaron con dolo y representan un peligro no solo para Neto y sus amigos, sino para la comunidad pues lo que les hicieron a ellos pudo haberle pasado a cualquier otra persona.
Eran buscados hasta con ayuda de la Interpol
La Fiscalía, informó que se les buscaba para aprehenderlos por hechos en agravio de un joven en Angelópolis, por lo que desde este lunes fueron puestos a disposición de la autoridad judicial por su presunta participación en la golpiza contra ‘Neto Calderón’, por lo que permanecían en “los separos”.
Los gemelos acusados de agredir, junto con otros cinco jóvenes que aún se encuentran prófugos de la justicia, ya tenían una orden de aprehensión, por lo que el resto decidieron promover un amparo para evitar ser detenidos.
Sin embargo, el fiscal Gilberto Higuera Bernal dijo que estas acciones jurídicas no iban a detener su labor, pues incluso se había emitido una alerta migratoria con la Interpol para buscarlos fuera del país.
Pasaron 16 días para que los exestudiantes de la Anáhuac se entregaran a las autoridades, a fin de hacer frente a los cargos que se les impute por haber golpeado a Ernesto Calderón, un estudiante de la Universidad IEU que les reclamó haber lanzado un vaso de cerveza a una de sus acompañantes, después de salir del bar Rakata, en la Isla de Angelópolis.