Con equipo obsoleto y casi 50% de cámaras sin funcionar, el gobierno de Puebla invertirá más de 300 millones de pesos reactivar la operación de arcos de seguridad y llegar a dos mil 500 cámaras de vigilancia en el estado.
En rueda de prensa, el titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) presentó el Plan Centinela: Fortalecimiento Tecnológico para Arcos de Seguridad, para la reactivación de dichos complejos que fueron adquiridos hace ocho años en el gobierno de Rafael Moreno Valle Rosas.
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Detalló que se plantea la instalación de 130 Puntos de Monitoreo Inteligente sobre las principales vialidades del estado que coadyuven a la reacción de los elementos de seguridad ante cualquier emergencia.
Esto sumará 520 nuevas cámaras con conectividad sobre 15 circuitos carreteros establecidos de acuerdo con la incidencia delictiva, así como a las rutas de escape de los posibles delincuentes.
Respecto a los arcos de seguridad, Cruz Luna dijo que al no contar con mantenimiento general oportuno y actualizaciones respectivas a los sistemas informáticos, varios equipos se volvieron “obsoletos”, afectando la conexión de espejos municipales en otros arcos.
Agregó que las tecnologías para operar los videowalls se encuentran sin funcionamiento por falta de actualización o porque el cableado de video no existe o se encuentra dañado; en el tema energético solo se cuenta con el 30% de las plantas de emergencia que se encuentran para poder operar.
Además, destacó que no hay licencias para la visualización de todas las cámaras conectadas al C5i, por ello no hay manera de reforzar el monitoreo central desde el complejo de seguridad.
Por ello, también se adquirirán 500 licencias para conectar 500 cámaras en aquellos municipios que cuenten con tecnología compatible con el C5i para un monitoreo en tiempo real.
La mitad de las cámaras lectoras sin funcionar
El funcionario admitió que los arcos carreteros presentan rezago en su infraestructura y tecnología y cerca del 50% de las cámaras lectoras se encuentran sin funcionar y no cuentan con cámaras que activen alertas cuando se realicen actos de vandalismo.
Para ello se rehabilitaran los 22 arcos carreteros con 74 nuevas cámaras, 74 licencias y 48 analíticos para el reconocimiento de placas.
A su vez, el gobernador Sergio Céspedes Peregrina hizo un llamado a los alcaldes y a los empresarios a que actualicen su sistema de videovigilancia para que sean conectadas a las dos mil 500 cámaras que se tiene como meta conectar al C5, para hacerle frente a la inseguridad.
Dijo que la reactivación de los arcos, el aumento de puntos de monitoreo y la rehabilitación de los centros de recepción de llamadas son los puntos centrales del Plan Centinela.
Así quedará la cobertura de los arcos de seguridad en los diferentes municipios:
- Huejotzingo 14 municipios
- Atlixco 12 municipios
- Palmar de Bravo 21 municipios
- Cuapiaxtla 17 municipios
- Izúcar de Matamoros 45 municipios
- Tehuacán 22 municipios
- Libres 14 municipios
- Teziutlán 29 municipios
- Zacatlán 29 municipios
Lo anterior permitirá contar con más operadores de emergencia del 911, así como personal de los municipios; actualmente se cuenta con 150 elementos, 98 operadores intervinientes y 59 personas comisionadas de municipios y el Estado.
Tras el abandono en los gobiernos de Antonio Gali Fayad y Guillermo Pacheco Pulido, los arcos de seguridad se convirtieron en “elefantes blancos”, ya que trascendió una inversión de 721 millones de pesos y pese a eso huachicoleros y delincuentes lograron burlar los dispositivos a través de caminos alternos que usan para evitar ser detectados.
Cuando gobernó Miguel Barbosa Huerta se propuso rescatarlos con la finalidad de disminuir principalmente el robo a transporte, el secuestro y los asaltos con violencia a transportistas, pero fue hasta esta administración que se concretó.