La Comisión de Búsqueda de Personas del Estado de Puebla (CBPEP) operaba sin una metodología sustentada para la localización de las personas, era improductiva y se mantenía lejana de los familiares de las víctimas de desaparición.
Así lo señaló Luis Cervantes Gómez, quien presentó un diagnóstico de la productividad de la dependencia tras la salida de María del Carmen Carabarin Trujillo, tras una serie de críticas por su mal desempeño, así como las deficiencias con las que operaba.
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Destacó que desde su llegada, en septiembre de 2023, a la fecha, se han localizado a 179 personas de las 221 reportadas como no localizadas, lo que significa un 80.9% de efectividad.
Mientras que en el periodo de Carabarin Trujillo se encontraron a 142 personas de 435 desaparecidas hasta ese momento, es decir, un 33.1%.
En el registro histórico de las funciones de la CBPEP desde 2019 se tenían registradas dos mil 98 personas desaparecidas, de las cuales mil 290 han sido localizadas y quedan pendientes 808.
Los años donde más personas fueron ubicadas fue en 2022 con 376 casos, y el año pasado con 321.
Cervantes Gómez anunció nuevas acciones como búsqueda inmediata, uso de la metodología y acercamiento con las víctimas indirectas.
También afirmó que hay un trabajo conjunto con la Guardia Nacional (GN), Fiscalía General del Estado (FGE) de Puebla, policías municipales y con colectivos como el Voz de los Desaparecidos.
El funcionario detalló los rezagos por cada una de las direcciones y departamentos que componen la dependencia, por ejemplo, se encontró que en la Dirección de Análisis de Contexto no existía una metodología sustentada para crear planes de localización de personas.
Acusó que quienes integraban la comisión anteriormente solamente “copiaban y pegaban la información general” de los casos sin analizar que cada situación tenía un contexto distinto.
También, dijo que la Dirección de Acciones de Búsqueda, encargada de las tareas de localización de personas en campo, “acarreó improductividad y desconfianza”, así como un distanciamiento con las familias buscadoras.
Además, debido a que el plan de trabajo de 2023 no fue bien diseñado, no pudo disponer libremente de los recursos ya etiquetados, lo cual representó un subejercicio de cuatro millones 535 mil 635 pesos, que representó cerca del 40% del presupuesto del año pasado.
