Moderarse en gastos y establecer prioridades, garantizar alimentación, educación y salud, son algunos de los consejos que poblanos deberán seguir para poder sobrevivir la famosa “cuesta de enero”, sugirió el economista de la Ibero Puebla, Miguel Ángel Corona Jiménez.
En entrevista, el especialista comentó que la alimentación, la educación, así como la renta de hogares o la salud deben ser prioridad para las familias, además de hacer los ajustes necesarios para pagar sus deudas, no caer en intereses y termine siendo una carga más pesada.
Ver más: Molesta a automovilistas aumento de tarifa en casetas estatales
“Si ya están gastados los hogares, si ya tienen deudas, lo más importante es tratar de que no aumenten y eso podría implicar moderación en los gastos para que puedan cumplir con las deudas, ahí es importante que utilizando un presupuesto pudieran establecer prioridades”, señaló.
El especialista comentó que es importante generar una cultura de ahorro, esto permitirá afrontar cualquier imprevisto, pagar estudios o incluso adquirir un patrimonio, lo cual también llevará a dejar de comprar menos compras superfluas y más cosas necesarias.
“Si uno no tiene deudas tiene mayor posibilidades de poder ahorrar y dependerá de su voluntad para hacerlo, si las personas son austeras y están acostumbradas a comprar lo necesario van a ahorrar más y hasta se gastan lo que no tienen”, expresó.
Asimismo, Corona Jiménez apuntó que otra opción es buscar opciones de ahorro en algún instrumento financiero que pueda generar rendimientos arriba de la inflación, es decir, arriba de 6 al 8% es bueno.
Aunado a esto, comentó que otra buena alternativa es la inversión Certificados de la Tesorería de la Federación (Cetes) que es un mecanismo creado por el gobierno federal, cuyo rendimiento está alrededor del 11%, respecto a la inflación que va del 4 al 5%,
El académico resaltó que el gasto hormiga dependerá del nivel de ingresos, así como el estilo de vida que lleva, pero puede llegar al 10% de su ingreso total, por lo que dijo es importante cuidar este tipo de gastos ya que son consumos cotidianos de bajo valor, pero que finalmente acumulan gastos importantes que se van en propinas, café, snacks, o suscripciones a plataformas de ‘streaming’.