El arzobispo auxiliar, Tomás López Durán, hizo un llamado a la oración en favor de los menores de edad que son víctimas de la violencia, las adicciones, las persecuciones y las difíciles situaciones de salud.
Durante la misa dominical, expresó su preocupación por los niños que, en medio de conflictos armados y situaciones de violencia, sufren hambre, viven en la calle, son separados de sus familias, se ven obligados a unirse a grupos armados o son privados del acceso a la educación.
“A todos esos niños se les roba la infancia”, dijo con motivo del Día del Niño que se celebra este 30 de abril.
Además, destacó la importancia de recordar a los niños que luchan contra enfermedades y dificultades tanto en hospitales como en sus propios hogares.
Citando al Papa Francisco, quien ha llamado repetidamente a la solidaridad con los niños que sufren en todo el mundo, el obispo López Durán exhortó a los fieles a rezar por estos niños, considerándolos como un reflejo de la humanidad y reconociendo la necesidad de defender sus derechos.
En su mensaje, el arzobispo también hizo un llamado a la ciudadanía para que se conviertan en defensores de los derechos de los niños, los traten con amistad y hermandad, y compartan con ellos momentos de alegría y esperanza.