El gobernador de Puebla, Sergio Céspedes Peregrina informó que actualmente hay 150 menores víctimas de delito o abandono bajo resguardo en las casas de asistencia del Sistema DIF estatal; aunque esta cifra ha sido variable durante la administración, pues depende de la situación legal y familiar de cada uno de ellos.
En rueda de prensa, el mandatario poblano mencionó que en el caso del menor dos años que fue abandonado en una maleta de viaje en la colonia La Loma, de Puebla capital, este ya fue ingresado a la Casa de la Niñez Poblana durante el fin de semana, y se encuentra en condiciones estables de salud.
Mientras tanto, la Fiscalía General del Estado (FGE) lleva a cabo la investigación sobre quiénes son sus padres y quien o quienes fueron las personas que lo abandonaron el pasado 16 de abril.
El menor se llama Andrés Ricardo y su identidad fue revelada por el mismo DIF estatal, ya que están en busca de alguno de sus familiares, pues en primera instancia se detectó que padecía síndrome del niño maltratado.
El mandatario comentó que como este caso se tienen otros de 150 menores de edad bajo el cuidado del Estado; sin embargo, esta cifra es variable de acuerdo al proceso que tiene cada menor o adolescente que, en su momento, puede ser adoptado por una nueva familia, o bien se resuelve la situación con sus familiares.
En lo que va del año se han documentado al menos cuatro casos de menores y recién nacidos abandonados en plena vía pública.
Esta situación lleva a reflexionar sobre las causas de este tipo de actos, que a decir de la psicóloga de la Ibero Puebla, Giovana Gaytán, están relacionadas con algún trastorno o carencia de gestión emocional de los padres al no considerarse aptos para la crianza y optan por el abandono.
Cabe mencionar que, la Casa de la Niñez Poblana alberga temporalmente a menores de 0 a 12 años y 11 meses de edad que por alguna situación de vulnerabilidad deben permanecer en custodia legal, amparo y protección de la leyes que rigen la asistencia social, en tanto se resuelve la situación legal y familiar de cada uno de ellos, garantizando su protección integral, tanto física y mental para su óptimo desarrollo durante su permanencia en el albergue.
Durante su estancia se ofrece atención médica, psicológica, de ondontología, nutrición, educación escolar, actividades recreativas y culturales, así como fisioterapia en caso de necesitarlo.
