El titular de la Fiscalía de Puebla, Gilberto Higuera Bernal informó que grupos delictivos locales dedicados al robo de vehículos y al narcomenudeo han protagonizado actos de extrema violencia registrados en las últimas semanas en la capital poblana.
Esto, al confirmar que los tres cuerpos hallados en una camioneta KIA abandonada en el mercado Hidalgo, el pasado domingo, están vinculados con el asesinato de César Eduardo G., quien fue secuestrado afuera de un restaurante en Plaza Solesta.
Tras varias semanas de violencia en la capital, el fiscal señaló que estas bandas criminales han incurrido en actos de crueldad como desmembramientos, decapitaciones e incineraciones, motivados por sentimientos de odio o venganza hacia las víctimas.
Aunque en algunos mensajes los responsables se atribuyeron pertenecer al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), el fiscal precisó que se trata de disputas entre grupos delictivos locales que realizan actividades ilícitas, extendiendo su influencia a otras entidades.
“Como institución, y estoy seguro que la sociedad tampoco, no podemos aceptar que esto se convierta en algo ordinario. Entendemos que estos hechos se enmarcan en disputas por actividades económicas ilegales, que no solo afectan a Puebla, sino también a otros estados”, subrayó.
Higuera Bernal también destacó que, en el caso del robo de vehículos con mercancía, se han identificado unidades robadas en Puebla que posteriormente aparecen en otras entidades, lo cual obliga a la Fiscalía a investigar posibles conexiones.
Además, aunque es competencia de la Federación, el fiscal señaló que se está analizando el delito de robo de hidrocarburos en la región, especialmente en el caso de los cuerpos encontrados en la junta auxiliar de Santa María Xonacatepec. De los seis identificados, cinco eran originarios de Palmarito Tochapan y uno de Tecamachalco, municipios del Triángulo Rojo.
