Las estrategias implementadas para retirar a los vendedores ambulantes en el Centro Histórico de Puebla han culminado con la remoción de vallas y de elementos de las secretarías de Seguridad Ciudadana (SSC) y Gobernación, logrando reducir en un 95% el número de comerciantes en la zona.
El operativo del Ayuntamiento de Puebla, que inició el 9 de agosto, mantuvo cerrada la circulación de automóviles en las calles 2 Norte y 10 Oriente, 3 Norte y 12 Poniente, así como en 5 Norte y 6 Poniente, 7 Norte y 8 Poniente, y 4 Norte y 10 Oriente hasta el 12 de octubre.
Al momento de cerrar las calles del Centro Histórico, el alcalde Adán Domínguez Sánchez explicó que el objetivo era ordenar y limpiar el primer cuadro de la ciudad, con el apoyo de Normatividad y Regulación Comercial, Gestión de Riesgos y el Organismo Operador del Servicio de Limpia (OOSL).
El bloqueo se implementó justo antes del regreso a clases, y el gobierno de la ciudad se comprometió a no permitir la instalación de vendedores informales para evitar afectar al comercio establecido y generar competencia desleal. Posteriormente, solo se otorgaron permisos para la colocación de puestos durante las fiestas patrias en la Avenida Reforma.
Sin embargo, el 9 de octubre, la Asociación de Empresarios Establecidos del Centro Histórico de Puebla A.C. denunció una disminución de hasta el 70% en sus ventas debido al cierre de las principales calles del primer cuadro de la ciudad.
Según estimaciones de la asociación, esta caída en las ventas equivale a 20 millones de pesos mensuales, y 25 negocios han cerrado sus puertas por falta de ingresos en las últimas semanas.
Gobierno solo heredará entre 300 y 350 ambulantes
Recientemente, el secretario de Gobernación, Jorge Cruz Lepe afirmó que durante la actual administración se logró reducir en un 95% la presencia de vendedores ambulantes en el Centro Histórico, por lo que el gobierno entrante de José Chedraui Budib heredará entre 300 y 350 vendedores informales.
Destacó que hace tres años, el gobierno de Claudia Rivera Vivanco heredó alrededor de cinco mil comerciantes informales que se instalaban en el primer cuadro de la ciudad, vendiendo artículos de temporada, accesorios y comida.
El funcionario apuntó que se logró liberar de ambulantaje el corredor peatonal de la 16 de septiembre, así como las calles 5 de Mayo, Reforma y 2 Oriente-Poniente, además de rehabilitar calles adoquinadas y renovar el drenaje.
Sin embargo, queda pendiente la situación en la 16 Oriente-Poniente, frente al Mercado 5 de Mayo y la zona de Mariscos, un tema complicado que será abordado por la próxima administración.
