La línea 4 metropolitana, que circula por el Periférico Ecológico no puede considerarse un sistema de transporte articulado al mismo nivel que las anteriores, debido a varias complicaciones técnicas y estructurales, consideró Enrique García Fuentes, presidente del Colegio de Ingenieros Civiles del Estado de Puebla (CICEPAC),
En entrevista, cuestionó la falta de carriles confinados en esta línea, una característica esencial de los sistemas de transporte articulado como los de la Red Urbana de Transporte Articulado (RUTA).
“No es una línea de RUTA que se pueda equiparar a las anteriores, porque no tiene carril confinado. Además, no se mejoró el pavimento en los tramos, mientras que en otras líneas de RUTA se utilizó concreto hidráulico para soportar cargas superiores”, explicó.
El presidente del Cicepac subrayó que el concepto de transporte articulado está vinculado a vehículos con un solo motor que arrastran dos vagones, lo que permite una mayor eficiencia en el consumo de combustible y reduce la contaminación.
Sin embargo, según García Fuentes, esto no es posible en el Periférico Ecológico debido a las características de la vialidad y la carga que representa para la infraestructura existente.
Un sistema de paraderos, no de Metrobús
A pesar de que la Línea 4 se denomina “Metrobús”, el presidente de los ingenieros civiles consideró que el término es inapropiado. Consideró que la falta de carril exclusivo podría generar problemas de flujo y afectar la eficiencia del servicio, ya que los autobuses no podrían circular de manera continua, impactando directamente el tráfico de la vialidad.
“Le podemos llamar de la manera que queramos, pero lo que tenemos es un sistema de paraderos. Es un sistema de transporte público que no se puede llamar ‘Metrobús’ porque no tiene carril confinado. Esto significa que los automovilistas pueden invadirlo”, señaló García Fuentes.
El experto también hizo mención de los inconvenientes generados en otras vías de la ciudad, como el Bulevar 5 de Mayo y la Diagonal Defensores de la República, donde el tráfico se ha vuelto más incómodo para los automovilistas. Sin embargo, recordó que el objetivo principal de este sistema es beneficiar al 70% de la población que no tiene acceso a un automóvil.
“Lo que se busca es privilegiar al 70% de la población que depende del transporte público, pero el sistema debe ser tan eficiente que incluso aquellos que tienen automóvil prefieran tomar el Metrobús por su seguridad, comodidad y menor riesgo de accidentes”, afirmó.
Soluciones y retos por resolver
A pesar de las críticas, García Fuentes subrayó que es fundamental implementar soluciones efectivas para mejorar la circulación y la seguridad del transporte.
“No podemos permitir que la gente cruce el Periférico de manera improvisada. Las autoridades deberán encontrar una forma adecuada para que el sistema funcione de manera óptima”, concluyó.
La línea 4 del Metrobús, inaugurada recientemente, sigue generando debate sobre su funcionalidad y su capacidad para ofrecer un servicio eficiente y seguro. Expertos en movilidad también plantean desafíos de seguridad, mantenimiento y vinculación digital que las autoridades deberán resolver para garantizar que el sistema sea una alternativa viable y atractiva para los poblanos.