Habitantes del Centro Histórico propusieron al gobierno municipal de Querétaro que coloque elementos encubiertos para vigilar la zona, dado el incremento en la percepción de inseguridad.
Luego de que en junio y principios de agosto se presentaran varios actos violentos, siendo el más significativo el homicidio de la joven Samantha en la calle Ezequiel Montes, vecinos y comerciantes sostuvieron una reunión con el delegado del Centro Histórico, Octavio Mata, y con representantes de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, para dialogar sobre las estrategias de seguridad en la zona.
Tras el encuentro, los habitantes dijeron que solicitaron operativos con elementos policiales vestidos de civiles, para que pasen desapercibidos mientras detectan las situaciones de riesgo o posibles delitos en el área, la cual calificaron como una de las más peligrosas de la ciudad.
“Tenemos una propuesta de bastantes vecinos de que haya unos rondines especiales en toda esta zona que es la más conflictiva de Querétaro. Vamos a ver si nos autorizan para que haya unos rondines de gente que vaya vestida de civil, que no se note que trabaja para el gobierno y que vaya viendo los focos rojos”, afirmó Miguel Ángel Sáez, uno de los colonos.
Los vecinos se quejaron de que la respuesta de las autoridades ante hechos delictivos ha sido lenta, y que la percepción de inseguridad ha incrementado durante al menos los últimos 5 años, por lo cual consideraron necesario contar con un operativo permanente.
Denunciaron también que las calles del Centro se han vuelto muy peligrosas para las mujeres, por lo que los operativos ocultos estarían enfocados en garantizar su seguridad. Además, pidieron que el municipio incremente el alumbrado público y el número de cámaras de videovigilancia para dar cobertura a los puntos ciegos de la zona.
“Ya vivimos con incertidumbre, cuidándonos de quién está enfrente, atrás, ya nos da cierto temor y luego ya no quiero dejar que mis hijos salgan, ya me da miedo”, puntualizó Alejandrina Aranda, otra de las afectadas.
La semana pasada, el alcalde Luis Nava aseguró que se incrementaría la seguridad en la zona del templo de Santa Rosa de Viterbo, luego de que ocurriera el homicidio de Samantha y dos ataques del mismo agresor a otras dos mujeres, así como un intento de asalto a un reportero.
Otra de las zonas donde se robusteció la presencia policial fue la de avenida Universidad, a la altura de Tecnológico, luego de que el pasado fin de semana, una joven denunciara por redes sociales haber sido golpeada por un sujeto en supuesto estado inconveniente.
