Este 31 de marzo se cumplió el último plazo que la Secretaría de Desarrollo Urbano y Obras Públicas (Sduop) fijó para concluir el Paseo 5 de Febrero; sin embargo, la obra no está finalizada y lleva 7 meses de retraso.
Fue el pasado 8 de enero cuando el titular de la Sduop, Fernando González Salinas, aseguró que a más tardar en el primer trimestre del 2024, la mega obra vial estaría terminada.
“En la conferencia que estuvimos en la oficina les dije que durante el primer trimestre de este año, o sea que podría ser a finales de febrero o principio de marzo (...). Soy el primero que quiere que se concluya antes de, yo quiero que se concluya la última semana de febrero, y si no, la última semana de marzo”, señaló el secretario en su momento.
Anteriormente, el gobierno de Querétaro estimaba que antes del 31 de diciembre del 2023 la obra estaría concluida; sin embargo, no sucedió. Incluso, el contrato que acordó el gobierno con la constructora ICA por alrededor de 6 mil millones de pesos establece que el Paseo 5 de Febrero tenía que estar listo para el 26 de agosto de 2023, pero ese plazo tampoco se cumplió.
Actualmente, la parte más atrasada de la obra es el paso a desnivel que conectará los carriles centrales con la avenida Las Torres, a la altura de la carretera a Tlacote. Los trabajadores continúan con labores de excavación, y al menos la mitad de la calle permanece cerrada. Según González Salinas, los trabajos en dicha área se vieron afectados por imponderables, como el hallazgo de infraestructura pluvial que no estaba contemplada cuando se planeó el proyecto.
En esa misma zona de Tlacote, continúa la construcción de dos puentes elevados. En esta semana, los trabajadores terminaron de montar las trabes metálicas que constituirán a estos pasos superiores, uno que irá de la carretera hacia el norte de la ciudad, y el otro en sentido opuesto.
Otra estructura que sigue pendiente es el puente elevado que va de la avenida Zaragoza hacia el sur, en dirección a Plaza de Toros. Pese a que el que va de Prolongación Zaragoza hacia el norte fue abierto desde principios de diciembre pasado, el otro puente, bajo el cual se ubican 74 locales comerciales, no ha sido abierto a la circulación.
Tampoco los carriles laterales que van desde la vía del tren hasta la avenida Epigmenio González han sido abiertos, ni la calle que conecta dicha avenida con la avenida San Diego.
A lo largo de los 5.8 kilómetros de Paseo, continúan en construcción banquetas y ciclovías. De hecho, el miércoles pasado, organizaciones civiles se manifestaron por un tramo de ciclovía mal colocado a la altura del IMSS de Zaragoza.
Los elevadores para personas con discapacidad que se instalarán en los puentes peatonales de 18 de Marzo y la UAQ no han sido puestos en funcionamiento, pese a que los puentes llevan más de un mes abiertos.
Si bien el cárcamo de rebombeo de Epigmenio González, los carriles centrales, el carril confinado con las 7 estaciones de Qrobús y 5 de los 8 puentes elevados ya están en operación, falta una parte considerable de infraestructura peatonal y ciclista, además de semáforos, señalética y áreas verdes.
El pasado 11 de enero, el contralor del estado, Óscar García, indicó que marzo era la fecha perentoria, por lo cual, si ICA no entregaba la obra en ese mes, sería sujeta a las sanciones obligatorias que el contrato estipula, además de que se le podría abrir un procedimiento de responsabilidad.
“Contractualmente hablando, la Secretaría de Obras Públicas está en tiempo y ejecutando la obra conforme al contrato celebrado con ICA, y en caso de que esta empresa no cumpla el plazo definitivo que se le fijó ya, ahí sí tendrían que aplicarse las sanciones y penas convencionales (...) La que indicó ahorita el secretario de Obras Públicas es la definitiva”, dijo en aquella ocasión.