Kim Pérez, de nueve años, se siente especialmente atraída por la Viga, uno de los aparatos más desafiantes de la gimnasia artística. Para Kim, cada día es una oportunidad de superarse y aprender algo nuevo. Ha participado en competencias en Estados Unidos, Guadalajara, y en eventos estatales, donde ha dejado claro que su trabajo duro da frutos. En Estados Unidos, logró un meritorio cuarto lugar, y en Guadalajara, se alzó con los primeros lugares en distintas categorías.
A pesar de sus logros, Kim mantiene una actitud humilde y orientada hacia la mejora continua.
“Estoy orgullosa de mi trabajo porque entreno muy duro todo el tiempo, pero siempre busco mejorar mi calificación y corregir mis errores”, comenta.
Para ella, la gimnasia no es solo un deporte, sino una fuente de diversión y satisfacción: “Me gusta, es divertido y lo disfruto mucho”.
A sus ocho años, María Julia Granados ya ha enfrentado la presión de competir en escenarios internacionales. Ha participado en competencias en Estados Unidos, Guadalajara, y eventos estatales, obteniendo resultados destacados. En E.U., consiguió dos segundos lugares, y en Guadalajara, alcanzó un tercer lugar. Aunque se siente orgullosa de su esfuerzo, María Julia es consciente de que siempre hay espacio para mejorar.
“Me siento orgullosa de mi trabajo, aunque cualquier lugar es valioso porque me esforcé, pero sé que hice mal algunas cosas y que debo corregirlas”, reflexiona.
Para María Julia, la gimnasia es una fuente de tranquilidad y motivación. “Me tranquiliza y es algo que me gusta; me esfuerzo y quiero seguir haciéndolo”, afirma, mostrando la madurez y determinación que la caracterizan a tan corta edad.
Mía Lazcano, también de ocho años, comparte con Kim el gusto por la Viga, su aparato favorito. Participó en la Copa Pro en el nivel tres, donde su dedicación y esfuerzo fueron recompensados con la alegría de la victoria.
“Me siento feliz por ganar, sé que debo seguir esforzándome para estar en los primeros lugares”, comenta Mía, con la seguridad de quien tiene grandes sueños.
El objetivo de Mía y sus compañeras no es pequeño: quieren llegar a los Juegos Olímpicos. Su pasión por la gimnasia es evidente en cada palabra y en cada entrenamiento. “Nos gusta y queremos llegar a las olimpiadas, es nuestro sueño”, declara con determinación.
Kim Pérez, María Julia Granados y Mía Lazcano representan el futuro de la gimnasia queretana. Con la guía de sus entrenadores y el apoyo de sus familias, estas jóvenes atletas están construyendo las bases de una carrera deportiva que va por buen camino. Cada una de ellas, con su estilo y personalidad única, demuestra que la gimnasia en Querétaro está en crecimiento.
