A partir de este mes de diciembre, al menos 5 comunidades de la delegación de Maconí, en Cadereyta de Montes, comenzarán a ser proveídas de agua potable a través de tuberías. Así lo aseguró el vocal ejecutivo de la Comisión Estatal de Aguas (CEA), Luis Alberto Vega Ricoy.
A poco más de un año de la marcha de Maconí, tras la cual el gobierno estatal acordó cumplir con sus demandas de agua, el funcionario informó que antes de concluir el 2024, al menos 80 familias de las comunidades de El Hortelano, Rancho La Luz, La Blanca, El Torno y La Joya contarán con servicio de agua en sus casas.
“Nosotros por la parte de Maconí, ya en diciembre estamos con agua en las comunidades que añejamente ha sido más problemático llevar el agua. La Luz, El Hortelano, La Blanca, que son comunidades muy muy lejanas en la delegación de Maconí, en diciembre ya estaremos en capacidad de poder entregar agua corriente, o sea, agua entubada, a esas comunidades. Son pocas casas, porque son comunidades muy alejadas con pocos habitantes; sin embargo, son muy representativas para garantizar el derecho humano al agua”, dijo.
Reubican a familias de Maconí
Por otra parte, con respecto al predio de 21 hectáreas que donó la CEA en Vizarrón para reubicar a 300 familias de Maconí, el vocal explicó que el terreno será administrado por el Instituto de la Vivienda del Estado de Querétaro (IVEQ) para desarrollar un proyecto habitacional.
El predio, donado a mediados de noviembre, fue uno de los compromisos del estado para brindar un espacio con mayor acceso al agua a los habitantes más afectados.
“Nosotros lo entregamos al IVEQ, porque ya nosotros como Comisión Estatal de Aguas no nos encargamos de urbanizar ni nos encargamos de esa parte. El predio ya está entregado al IVEQ, que es el que está haciendo los trámites con las familias que van a ser beneficiadas para poderse mover para allá”, sostuvo.
Cabe señalar que en la marcha de Maconí, realizada a finales del año pasado, más de mil 500 habitantes reclamaron por el incumplimiento con la instalación de infraestructura de agua potable en sus poblados, que el gobierno estatal había prometido desde 2006 con la construcción del Acueducto II.