En la madrugada de este jueves, salió la marcha, de la presidenta municipal y habitantes del municipio de Cadereyta, a la capital del estado para pedir la solución y poner fin a la huelga. Dicha movilización se espera que arribe este viernes.
Desde las 5 de la mañana, la alcaldesa Astrid Ortega, destacó que la marcha es para lograr que continúe la transformación en la demarcación, y que con o sin huelga no se va a frenar.
“Esta lucha no es de una persona, es de todo un pueblo (...) les pedimos que esta marcha sea pacífica, que de ninguna manera y bajo ninguna provocación vayamos a tomar el camino de la violencia”, conminó.
Remarcó que se ha intentado todo en la vía legal y procesal para que la huelga se resuelva, buscando diálogo y entregando propuestas a líderes sindicales, pero no se ha encontrado disposición, por lo que dijo poco más de 80 mil habitantes necesitan respuestas.
El lograr que las autoridades estatales y laborales ayuden a “destrabar” esta problemática, es la exigencia que se llevará al Tribunal, y al gobernador, ya que además de las limitaciones para la prestación de los servicios, está en pausa los planteamientos para solucionar el abastecimiento del agua, a través del proyecto de municipalización.
“Estamos tocando intereses económicos, de empresas, de particulares que han ganado y lucrado con millones de pesos extrayendo el agua de la zona norte del municipio, y hemos planteado que no vamos a permitir el saqueo, y esto nos ha valido intentos de desestabilización de nuestro gobierno y que nos obliga a marchar para que la máxima autoridad nos haga caso, no queremos pensar que sea por un tema de trato diferenciado a la población por haber votado por un proyecto político diferente el pasado 2 de junio, y nos estén castigando”.
En tanto, en redes sociales algunos habitantes se deslindaron de esta actividad al considerar que las marchas no son una solución, además de que se pronunciaron en contra de una “marcha forzada” y con “tintes políticos”.
“Marchar no soluciona nada, especialmente cuando no se trata de una expresión genuina de la ciudadanía, sino de una estrategia impulsada por intereses partidistas (...) la marcha no representa la voluntad ciudadana. Fue convocada por un partido político, no por el pueblo”, señala el documento.
Por ello, se exigió que se conforme una comisión especial, imparcial y con sustento legal, que permita resolver esta situación dentro del marco de la ley, con diálogo y voluntad política.
En esta movilización se observó la participación de la presidenta estatal de Morena Gisela Sánchez, los diputados federales Rufina Benítez y Gilberto Herrera, los diputados locales Blanca Benítez, Rosalba Vázquez y Eric Silva.