El pasado jueves 29 de febrero de 2024, Elon Musk, cofundador de OpenAI, presentó una demanda contra la organización “sin fines de lucro” dedicada al desarrollo de Inteligencia Artificial. En el documento se acusa a la institución, su CEO Sam Altman y hasta por consecuencia a ChatGPT de incumplir su acuerdo fundacional.
En esencia, se supone que el objetivo original de OpenAI era el de convertirse en un organismo dedicado a la investigación y desarrollo para el avance del sector en general.
Pero según Elon se habría convertido ahora en una “subsidiaria de facto” de Microsoft, presentando una “grave amenaza para la humanidad” con su desarrollo de la Inteligencia General Artificial (AGI).
Durante día la organización guardó un silencio sepulcral sobre el tema pero ahora en respuesta, altos ejecutivos de OpenAI han circulado memorandos internos a sus empleados refutando punto por punto las afirmaciones de Musk.
Con esto se abre un nuevo capítulo en esta lucha que parece tendrá un desenlace inevitable hasta llegar a los tribunales.
Los memorandos internos de respuesta de OpenAI a la demanda de Elon Musk
De acuerdo con lo que reporta CNBC, el CEO de OpenAI, Sam Altman, describe en su memorando la profunda decepción que siente por el cambio de actitud de Elon Musk, a quien consideraba un héroe. Altman advierte al personal que los ataques de Musk continuarán en el futuro.
Por su parte, el director de estrategia de OpenAI, Jason Kwon, se enfoca en refutar las tres principales acusaciones de la demanda. En cuanto al peligro de la AGI, Kwon argumenta que GPT-4, la última creación de OpenAI, está lejos de ser un AGI, definiendo este tipo de inteligencia como un “sistema altamente autónomo capaz de idear soluciones novedosas a desafíos de larga data”.
Kwon niega que OpenAI haya abandonado su misión de beneficiar a la humanidad, destacando la disponibilidad de sus APIs y productos como prueba de ello.
Finalmente, Kwon aclara la relación con Microsoft, afirmando que la empresa no tiene control sobre la investigación, desarrollo o dirección de OpenAI, y que incluso son competidores en el mercado de herramientas de IA.
Los memorandos internos también sugieren que la demanda de Musk podría estar motivada por “el arrepentimiento” por haberse distanciado de OpenAI en el pasado.
Sin embargo lo cierto es que la demanda se presenta en un momento crucial para la empresa, que se encuentra en un innegable proceso de transición de una organización sin fines de lucro a una empresa con fines de lucro.
Así que la conclusión más obvia con los factores visibles que existe una altísima posibilidad de que Elon Musk busque renegociar su participación en la empresa o incluso tomar el control de la misma en algún porcentaje más adelante.
