El Tribunal Supremo de Estados Unidos ha respaldado una ley que podría llevar al cierre de TikTok en el país si la plataforma no se separa de su empresa matriz, ByteDance, antes del 19 de enero de 2025. La norma, aprobada en abril de 2024, otorga un plazo de nueve meses para que ByteDance venda sus operaciones a un inversor de un país que no sea considerado un “adversario” por Estados Unidos.
En una audiencia celebrada el pasado viernes, TikTok solicitó al Alto Tribunal revisar la constitucionalidad de la norma, argumentando que viola la Primera Enmienda de la Constitución, que protege la libertad de expresión. Sin embargo, la administración federal defendió que la seguridad nacional prevalece ante la posible influencia del gobierno chino a través de la recopilación de datos y la manipulación de contenidos.
Opiniones divididas en el Supremo
La magistrada Elena Kagan afirmó que la ley está dirigida únicamente contra ByteDance, una empresa extranjera que no tiene derechos protegidos por la Primera Enmienda. Por su parte, el magistrado Brett Kavanaugh señaló que TikTok podría ser utilizado por China para “desarrollar espías y chantajear” a ciudadanos estadounidenses, mientras que el magistrado John Roberts expresó preocupación por la regulación de un medio de comunicación.
En contraste, Noel Francisco, abogado de TikTok, comparó la medida con censurar medios como CNN o Fox News por la forma en que gestionan sus contenidos. También señaló que la norma representa una amenaza a la libertad de expresión tanto para la plataforma como para sus usuarios.
Debate político y próximo cambio de gobierno
La ley ha generado controversia, ya que entrará en vigor el 19 de enero, un día antes de que Donald Trump asuma la presidencia tras su victoria en las elecciones de 2024. Trump, quien intentó prohibir TikTok durante su primer mandato, pidió al Tribunal que paralizara la medida hasta su investidura.
Con esta decisión del Tribunal Supremo, TikTok enfrenta una cuenta regresiva para cumplir con la norma, mientras crece el debate sobre la libertad de expresión y la seguridad nacional en la era digital.
