Las redes sociales se convirtieron en un espacio al que acceden, todos los días, millones de personas alrededor del mundo. Si bien algunos usuarios toman estas aplicaciones como entretenimiento, la realidad es que los sitios pueden difundir denuncias para que las autoridades tomen cartas en el asunto; tal como lo hizo Sari, una mujer quién aseguró que empleados de un hotel, ubicado en la ciudad de Monterrey, le impidió el acceso ya que estaba junto a su perro guía.
La afectada se presentó, “Hola soy Sari, usuaria del perro guía Odín” y después narró lo que le sucedió en las instalaciones: “Pido de su colaboración para que me ayuden a denunciar este acto de discriminación que estamos viviendo. Vine a un evento de una posada navideña del trabajo y no me permitieron la entrada. Estoy aquí afuera; en ningún momento la recepción me dejó entrar. Argumentan que no se permite la entrada de mascotas”.
Si bien la afectada habló sobre el artículo 58 de la Ley Federal de Protección al Consumidor, los trabajadores se excusaron y se respaldaron con las “políticas del hotel”, mismas que “no permiten la entrada a ningún tipo de animales aunque el perro sea de asistencia”.
“Me dicen que no es discriminación; me dejan entrar acompañada de una persona, pero les digo que no, que yo necesito entrar con mi perro. Que no puedo manejar sola y me dicen que no me están discriminando ya que solamente son las políticas de la empresa”, finalizó Sari.
Procuraduría Federal del Consumidor asiste a mujer con discapacidad visual en Monterrey
Tras la viralización de los hechos, elementos de la Procuraduría Federal del Consumidor arribaron al lugar de los hechos para investigar qué es lo que ocurría. Después de algunos minutos, la mujer pudo ingresar al hotel junto a su perro guía y así convivir con sus compañeros de trabajo.
De acuerdo con el mismo portal del gobierno federal, “los perros guía no son mascotas, son animales de servicio que desempeñan una labor de asistencia muy importante para las personas con discapacidad visual, ya que prácticamente se convierten en sus ojos, ayudándole a evadir una infinidad de obstáculos, que podrían representar un peligro”.
“¿Sabías que las personas con discapacidad pueden ingresar con su perro guía a cualquier lugar público, incluyendo restaurantes? El Art. 58 de La Ley Federal del Protección a los Derechos del Consumidor, indica que no se puede negar el servicio ni cobrar cuotas extra por el perro guía, además de que son muy nobles”, finaliza el sitio antes citado.