La actriz Anabel Gutiérrez, fallecida la noche del domingo 21 de agosto a los 89 años, recordó en una oportunidad los malos momentos que pasó durante su participación en Chespirito debido a la actitud de Florinda Meza, la esposa de Roberto Gómez Bolaños.
Aunque Anabel Gutiérrez, quien se dio a conocer por décadas de trabajo en la época de oro del cine mexicano, llegó a Chespirito con el personaje de Doña María Espotaverderona,la mamá de la “Chimoltrufia”, interpretada por Florinda Meza.
Anabel Gutiérrez, quien falleció en Puebla, según informó su sobrino José Luis Arévalo en un mensaje publicado en Twitter, recibió un ofrecimiento de Roberto Gómez Bolaños para interpretar el personaje en la serie Chespirito.
El carácter difícil de Florinda Meza
Las tensiones que le hizo pasar Florinda Meza la llevaron a llorar durante las grabaciones, pues según contó tiempo más tarde Anabel, la viuda de Bolaños consideraba que ella no estaba a la altura para actuar a su lado.
“No digo que sea mala persona, pero tenía un carácter muy difícil”, declaró Anabel Gutiérrez en una entrevista para el programa 24 x segundo.
Contó que Florinda Meza le dijo, entre otras cosas, que la llevaría a su camerino para “enseñarla a ser actriz”.
Los roces hicieron que a Anabel Gutiérrez la vieran llorando en varias oportunidades mientras duró su participación en Chespirito debido a los maltratos que recibió por parte de su hija ficticia en la serie, Florinda Meza.
El personaje de Doña Espotaverderona se incorporó a la serie de Chespirito en 1989 y se mantuvo hasta 1995.
El sitio Chespirito.fadom describe a Doña Espotaverderona como madre de La Chimoltrufia que suele visitarla a su casa, “luego por diferencias con el Botija, se queda en el Hotel de Don Lucho o en el Hotel Buenavista y su estancia se la descuentan a su hija (con descuento especial). Es viuda hace 20 años”.
