¿Te acuerdas del primer día de clases? Habían unos que tenían todo su material listo y otros que pedían una pluma prestada. Al final del día la regresaban toda mordida de la tapa. Daba un montón de coraje, pues algo que esperas es que regresen las cosas como las ofreciste. Sé que no podemos comparar el valor de un auto al de una pluma, pero esto mismo sucede cuando otros no saben respetar lo ajeno.
Cuestión de educación. Puede que aún tus padres te presten su auto para moverte con mayor seguridad. Algún amigo o familiar hayan ofrecido darte por unos días un vehículo mientras esperas que tu coche salga del mecánico. No importa la situación, es importante que sepas cómo devolverlo y cuidarlo. Así que toma nota.
5 mandamientos de un auto prestado o ajeno
1. Amarás al auto ajeno como el propio
Al igual que tu cuerpo, los automóviles están perfectamente equipados para responder a cualquier trayecto o actividad. Así que, si tú necesitas mantenerte en óptimas condiciones para dar siempre los mejores resultados. También tu propio auto y el que te prestaron, debes cuidarlos para que siempre puedan brindarte una inigualable experiencia de manejo.
2. Llenarás el tanque antes de devolverlo
Cuestión de ser agradecidos. No importa si te prestaron un auto con un cuarto de tanque. Al terminar el tiempo en el que te lo prestó tu amigo o familiar, regrésale su vehículo con el tanque lleno. Esto habla de lo agradecido que estás con ese gesto que tuvieron contigo.
3. No importa el tamaño del tope o bache, siempre conducirás con cuidado
Ya hemos hablado acerca de los beneficios del manejo defensivo. Y no solo tiene ventajas en el ahorro de combustible y cuidado del auto. Sino también, ayuda a disminuir las probabilidades de causar o ser parte de un accidente. Mientras conduzcas con cuidado, en mejores condiciones vas a poder entregar el coche.
4. Lo limpiarás después de usarlo
No se trata de llevarlo a que le realicen una limpieza profunda y/o detailing. Simplemente con evitar comer, fumar o tirar basura en el habitáculo puedes hacer mucho. Todo esto es importante que lo tengas presente. No es tu vehículo y te están haciendo un favor al ofrecértelo por el tiempo que lo necesites.
5. No harás que se lleven al corralón el auto de tu benefactor
La idea de que te presten un automóvil, es para que tengas cómo moverte por la ciudad mientras te regresan o compras tu propio vehículo. Así que, obedece todas las leyes de tránsito y evita que te priven del auto que te ofrecieron para evitarte andar en transporte público.
Ya sea que prestes o seas tú el beneficiado de un ser generoso. Es importante tener en cuenta que no se le debe dar un mal uso al auto ajeno, ni al propio.