Los cambios de temperatura pueden ser un factor adicional a la hora de desarrollar infecciones en las vías urinarias o cistitis, conocida como la inflamación en la vejiga causada por bacterias.
A pesar que de el frío no es un factor determinante para desarrollar una infección, sí puede representar un riesgo. Exponerse al frío supone un aumento de los episodios de infección de orina debido a la mayor sensibilidad que presentan algunas mujeres a estas variaciones.
La cistitis puede afectar a mujeres entre los 20 y 60 años de edad y sus causas más comunes son falta de líquidos, el frío y la humedad, estreñimiento, falta de lubricación o frecuencia de relaciones sexuales.
Las infecciones en las vías urinarias suelen presentarse cuando las bacterias que se encuentran fuera del cuerpo ingresan a las vías urinarias, a través de la uretra y se multiplican.
¿Cómo puedo prevenirlo?
Hidratación. Tomar al menos 1.5 o 2 litros de agua sin azúcar al día es importante para prevenir la aparición de cistitis, pues la deshidratación es uno de los principales desencadenares.
Orinar con frecuencia. Es importante que no se contengan las ganas de orinar una vez que se presenta la necesidad.
Higiene. Realizar una higiene adecuada es uno de los aspectos fundamentales para prevenir la aparición de episodios recurrentes.