Justin Bieber se ha convertido en el encabezado favorito de Internet por cientos de razones, pero en el último tiempo ninguna de éstas tiene que ver con el talento que algún día lo hizo famoso.
Con la intención de limpiar mi karma -y el de quienes, como yo, leen o escriben notas sobre Bieber- quiero hablar sobre adolescentes que sí valen la pena. Niños de la edad de Justin que están haciendo algo por el prójimo y que son un excelente modelo a seguir no sólo para menores de 18 años, sino para todos nosotros.
Malala Yousafzai. A los 11 años, esta joven pakistaní comenzó su carrera como activista en pro de los derechos educativos de las niñas; a los 15, sobrevivió un intento de asesinato y continuó con su campaña para educar a las mujeres de su país. A los 16 años (en 2013), Yousafzai fue nominada a un Premio Nobel de la Paz.
Jack Andraka. Actualmente tiene 17 años, pero alcanzó la fama cuando en 2012 inventó un examen diagnóstico de bajo costo para identificar el cáncer de páncreas en etapas tempranas. La prueba tiene un 90% de precisión y es 26 mil veces más barata que las utilizadas comúnmente. Antes del invento de Andraka, era complicado identificar el cáncer de páncreas antes de que este se propagara por el cuerpo.
Angela Zhang. Hay quienes dicen que el invento de esta adolescente podría curar el cáncer, en las palabras de la joven se trata de “una nanopartícula que es como una navaja suiza para el tratamiento contra el cáncer, puede detectarlo, erradicarlo y monitorear la respuesta al tratamiento”.
Yash Gupta. A los 14 años Gupta comenzó Sight Learning, una organización que recolecta anteojos viejos y los dona a niños que los necesitan. Hasta ahora, Yash ha ayudado a 9,500 menores de Haití, Honduras, India y México.
Alexandra Scott. Antes de cumplir un año, Alex fue diagnosticada con cáncer; a los cuatro, decidió comenzar a vender limonada para ayudar a niños como ella. Poco tiempo después, creó la fundación Alex’s Lemonade Stand, que ha donado más de un millón de dólares para la investigación de esta mortal enfermedad. Alexandra falleció en 2004, a los ocho años.
Rene Silva. A los 17 años, Silva se volvió famoso tras reportear sobre una redada policial a través de Twitter; el joven de Río de Janeiro acompañó sus mensajes con imágenes y videos sobre lo que sucedía. La fama adquirida ayudó a Rene a impulsar su periódico local (que comenzó a los 11 años) y a dar voz a las personas de su favela. Silva, de 19 años, ha publicado su primer libro, A Voz do Alemão, sobre los habitantes de su vecindario y se ha convertido en un modelo a seguir para la juventud desfavorecida de Brasil.
Macallan Durkin. En un viaje a Botsuana, esta niña de 11 años se sorprendió al ver que fundaciones locales apoyaban a animales desamparados pero ignoraban a los niños de la calle, quienes debían alimentarse con las sobras de los animales. Al regresar a casa, Durkin decidió ayudar a los infantes creando una organización llamada GoodyGoodies, que provee alimentación y educación a jóvenes necesitados.
Timothy Hwang y Minsoo Han. Estos dos adolescentes comenzaron Operation Fly, una organización de jóvenes tutores que utilizan el dinero que ganan dando clases para vestir y alimentar a personas sin hogar. Actualmente, esta organización se ha expandido a cinco ciudades y cuenta con más de 800 voluntarios.
Olivia Bouler. Hace unos cuantos años, tras un derrame de petróleo en el Golfo de México, Olivia Bouler, de 13 años, logró reunir 200 mil dólares para salvar a las aves afectadas por el desastre vendiendo dibujos y pequeñas obras de arte que realizó.
