Dicen que la música puede hacer magia, y tal parece que Enrique Bunbury logró hechizar a los tapatíos, no sólo por un concierto que hizo cimbrar el Auditorio Telmex de Guadalajara, la noche del miércoles, sino porque dejó plasmada su estancia en dos videos.
El cantante español arribó a la ciudad, cuatro días antes de su concierto, con su tour Palosanto, y aprovechó el legendario Panteón de Belén para mostrar visualmente su tema Los Inmortales. Estuvo el pasado martes, por más de seis horas en el emblemático lugar de la ciudad para ofrecer, sin querer, un concierto íntimo a los muertos.
El miércoles por la noche, ante un inmueble con poco más de diez mil personas, presentó su nuevo espectáculo que da vida su más reciente material discográfico Palosanto.
Enfundado en piel, el músico apareció al centro del escenario y por unos minutos se quedó contemplando al público, y al momento de tomar el micrófono, lanzó su primer mensaje a sus seguidores con Despierta.
“¡Guadalajara! Muchísimas gracias por venir esta noche y acompañarnos al Telmex, es un honor y privilegio estar en este escenario y cantar ante ustedes. Vengo a mostrarles el nuevo material y hacer un recorrido por el pasado más inmediato y lejano”, fueron las primeras palabras de Bunbury para comenzar con los primeros acordes de Los Inmortales.
Fueron en total 26 temas, en los que mostró su evolución no sólo musical sino de dominio total. Se mostró libre, en sus bailes imitaba a un boxeador y se erguía con la mano en alto, lo que provocó que miles de gargantas lo ovacionaran en cada provocativo movimiento.
Durante el show en vivo grabó otro video del tema Salvavidas, para hacer una visita memorable de su estancia por tierras tapatías.
Al final, la magia hizo efecto y Enrique Bunbury con todo el arte y la experiencia prometió volver a una tierra que lo hechizó.
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