Pedro Kumamoto no niega su interés por ser presidente o gobernador, pero tiene claro que el objetivo primordial es empujar una agenda ciudadana que renueve la manera en la que se hace política en México.
Y a casi un año de haber asumido el cargo como diputado independiente por el Distrito 10 de Zapopan, Jalisco, Publimetro conversó con él.
Ahora que te desempeñas como diputado ¿qué tanto ha cambiado tu percepción sobre los políticos y sobre los partidos?
– Llegamos a este espacio como movimiento social y con la claridad de hacer las cosas, de cambiar las instituciones; sin embargo este poder usualmente se utiliza de manera facciosa, es decir, para beneficiar a los amigos y golpear a los enemigos y creemos que eso tiene que cambiar. Y lo que te puedo decir es que seguimos con la claridad de que el poder así se ejerce en la mayoría de los casos.
En los partidos políticos hay gente que chambea muy duro, que es honesta, pero siendo muy franco ese tipo de personas normalmente no toma las decisiones y creo que eso es grave, porque refleja que en nuestro país un cúmulo de personas son quienes toman las decisiones.
¿Cómo es el día de un legislador, es decir, cómo es un día de Pedro Kumamoto?
– Un día de trabajo normal comienza a las nueve de la mañana con reuniones de trabajo con personas del Distrito, con organizaciones, grupos vecinales o incluso de escuelas. Posteriormente, durante el día hay gestiones de Comisiones o Sesiones de Pleno, es decir donde nos reunimos para que todos las y los diputados voten y éstas se acaban más o menos a las cuatro o cinco y media de la tarde; incluso hay días que acaban en la madrugada.
En las tardes asisto al Distrito, a veces vamos a tianguis a espacios públicos, a universidades a rendir cuentas a platicar con las y los vecinos y sobre todo para platicar acerca del trabajo legislativo que estamos generando.Regularmente terminamos hacia las seis de la tarde, pero hay días que se alargan dependiendo, insisto, de la cantidad de reuniones y visitas que tengamos.
¿Cómo ha sido el trabajo parlamentario?
– Para nosotros ha sido un trabajo muy importante y muy interesante, porque hemos podido sobre todo impulsar una visión mucho más técnica, menos grillesca de lo que queremos impulsar. Por ejemplo, estamos acostumbrados que cuando se trata el tema de la seguridad se habla de endurecer las penas y nosotros lo que hemos planteado es un nuevo modelo de Ministerio Público, un nuevo modelo de Fiscalía, un nuevo modelo del Poder Judicial, entonces nos gusta ir a las causas profundas de las problemáticas. También es cierto que somos una diputación de temas que tienen que ver con la sustentabilidad, con la justicia social y con los derechos humanos. Entonces, yo al menos creo, que hemos logrado hacer un buen balance entre estar en un espacio político, pero también darle un matiz técnico y activista.
¿ Qué tan difícil ha sido el que tus iniciativas se concreten?
– Todo tiene un trabajo muy profundo de cabildeo por parte del equipo de asesores y de parte mía; sin embargo el trabajo más fuerte de cabildeo que ha sucedido es por parte de las personas. La gente les exige que seamos tomados en cuenta, que se aprueben nuestras iniciativas y lo que te puedo decir es que hasta el día de hoy ninguna de mis iniciativas ha sido rechazada; todas o siguen en estudio o han sido aprobadas. Y eso nos puede decir que nuestras iniciativas son propuestas hechas con sentido común, con la técnica necesaria y evidentemente con la lógica de poder impulsar derechos que son necesarios en el Estado de Jalisco.
¿Cómo es tu trato con los demás diputados? ¿Cómo sientes tú que ellos te perciben?
– Yo creo que no es una percepción uniforme. Soy el diputado más joven y el único que ha sido gestor cultural de profesión aquí en Jalisco. Nosotros nos consideramos parte de un movimiento político que se llama Wikipolítica, entonces tenemos muchas posturas frente a los procesos políticos que pueden ser muy distintas, pero también es cierto decir que dentro del Congreso también hay personas sensatas, chambeadoras, honestas, que quieren muchas cosas similares a nosotros. Entonces lo que te puedo decir es que siempre estamos buscando hacer la coincidencia y no tanto exacerbar en qué somos distintos, sino en qué y cómo podemos trabajar en conjunto.
¿Algunos sectores que te votaron se han desilusionado con tu trabajo o se han alejado?
– Desde luego tomar decisiones genera conflictos, pero creo que siempre he explicado por qué voto lo que voto y eso lo pueden checar en https://kumamoto.mx/ que es una práctica que me parece muy innovadora. Todas mis votaciones en Pleno tienen un razonamiento de voto y por otro lado creo que hay sectores que han mantenido el apoyo y tan es así que en la última encuesta del periódico Reforma se plantea que este espacio de diputación tiene la mayor popularidad para encabezar un proyecto de Alcaldía en Zapopan. No es ahorita nuestro objetivo, pero sí te demuestra que somos apoyados por nuestro trabajo.
¿Ha crecido el apoyo de la gente de tu distrito luego de que asumiste y de que ejerces como diputado?
– Yo lo siento a flor de piel, porque vamos a los tianguis, a los espacios públicos donde la gente te dice lo que piensa realmente y creo en general que notan que se está haciendo otro tipo de política mucho más cercana, honesta y claro acerca de lo que se puede y no se puede hacer. Por ese lado yo me siento muy contento y no te voy a mentir, la verdad es que nos ha costado muchísimo trabajo, hemos trabajado tratando de estar a la altura de la responsabilidad histórica que significa esto, pero la neta es que estoy muy contento de que a casi un año creo que está valiendo la pena.
Tú donas el 70 % de tu sueldo ¿Realmente cuánto necesita un diputado para vivir?
– No sé cuánto necesite un diputado en lo general, pero creo que vivo en una situación privilegiada frente a la inmensa mayoría de la población, ya no se diga de las y los jóvenes que viven de trabajos precarios mal pagados y poco valorados. Todo se puede checar en mi página, a partir del mes pasado se hizo un acuerdo para que los diputados siempre estemos ganando 33 mil pesos mensuales, de 66 mil, de los cuales dono 23 mil 83 pesos y yo me quedo con 9 mil 892.
Hace unas semanas platicamos con Jorge Castañeda y nos decía que con toda seguridad un candidato independiente estaría en la boleta electoral en 2018 y competiría.
Sin embargo, en el panorama político nacional, te encuentras tú; Ismael Figueroa en la Asamblea Constituyente; el Bronco como gobernador de Nuevo León. ¿No han perdido fuerza las candidaturas independientes?
– Creo que no se puede hablar de las candidaturas independientes, sino que tenemos que hablar de cada proceso que se vive de manera distinta. Es decir, no tenemos nada que ver entre nosotros, entonces yo no hablaría de que hemos perdido peso, sino en todo caso, que las candidaturas que tienen más coherencia y consistencia ideológica o política pueden beneficiarse con la confianza de las personas y aquellas que no, la gente les retira su apoyo.
En ese sentido yo le diría a las personas que no simplifiquen, que no piensen que independiente es sinónimo de bueno, sino que se tiene que votar por aquellas personas que tienen la mejor trayectoria, nada más y nada menos.
¿En 2018 dónde te ves?
– Me veo participando en la política entendida como el espacio del debate de las ideas públicas, espero que pueda impulsar la consolidación de una agenda para el tema presidencial en conjunto con Wikipolítica. Me veo también participando de alguna manera en un proceso local; no necesariamente sería electoral todo, lo que podría ser en distintas lógicas.
Pero por lo pronto te puedo decir que la reelección legislativa puede ser un escenario, la elección municipal puede ser otro escenario o por qué no, un escenario de un espacio federal. Pero también tengo que decirlo con toda claridad, no es algo primordial para mí, lo fundamental es impulsar una agenda política, de programas, de ideas que renueven la manera en que se está haciendo política a nivel local y nacional.
¿Te interesaría ser gobernador o presidente?
– Yo creo que puede ser un camino a futuro, porque me hace falta mucha experiencia, mucho trabajo y también me falta, incluso, pasar por procesos académicos, pero siendo franco no se trata tanto del puesto sino de las ideas. Y creo que ha sucedido lo opuesto en la política mexicana, en donde primero son los puestos ya después dejan las ideas, entonces creo que tenemos que invertir el orden de los factores.