“A pesar que una compañera tenía su menstruación, le dijeron que se pusiera un pañal porque tendría que entrar al área de pacientes Covid-19 y una vez que ingresamos no nos permiten ir al baño”, acusa Sofía, una de las enfermeras que trabaja en una clínica privada en la ciudad de Mérida, Yucatán.
En entrevista con la Silla Rota, explica que, al principio de la contingencia, la Jefatura de enfermería había acordado con ellas que quien se encontrara con algún impedimento físico, no cuidaría de personas diagnosticadas con coronavirus, toda vez que como parte de los cuidados para evitar el contagio no pueden hacer uso del baño durante su turno.
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Otra de las enfermeras denuncia que su principal preocupación es que les prohíben decir que hay pacientes con Covid-19 en el nosocomio. Los hacen llamar “pacientes de código respiratorio”, para no alarmar a quienes ingresan por otro tipo de enfermedades.
Cabe precisar que no existe ninguna restricción de la Secretaría de Salud Federal para que hospitales privados atiendan a pacientes con coronavirus. Los nosocomios que cuenten con la capacidad para recibir casos positivos pueden hacerlo, siempre y cuando notifiquen al área de epidemiología.
Otra de las inconformidades del personal de enfermería es que no cuentan con un protocolo que les garantice una total sanitización al salir del turno.
“Cuando salimos del cuarto del paciente con Covid-19 vamos a otro espacio dentro de la misma área, donde nos retiramos todo el equipo de protección, incluida la mascarilla N95, solo te quedas con el uniforme, no te quedas ni con cubrebocas, en ese momento estamos expuestas durante algunos minutos”, cuenta María, otra de las enfermeras del hospital.
Además , señala que de poco sirve bañarse en otro cuarto, ya que es en el mismo piso de servicio de pacientes con coronavirus e, incluso, usan el mismo elevador donde ingresan a los casos positivos.
A esto se le suma la opacidad de la clínica con su propio personal, las enfermeras saben que algunos colegas que trabajan en el área de urgencias fueron diagnosticados con Covid-19.
“Le preguntamos a Rosario Romero, jefa de urgencias, y no los negó, le insistimos que nos dijera la verdad porque tenemos miedo por los compañeros que estuvimos en contacto y queríamos saber para tener las medidas y mayor protección”, relata Ana.
Cabe señalar que algunas de las recomendaciones de la Secretaría de Salud Federal para cuidar la salud mental y física del personal médico que atiende a pacientes con Covid-19 son estimular el auto-cuidado físico y tomar descansos periódicos y favorecer a la rotación de roles para evitar la carga de trabajo.
Algunas de las clínicas privadas en Yucatán que tienen la capacidad para recibir pacientes son el Faro Mayab, Star Médica y el Centro Médico Pensiones. Otros, como el Centro Médico de las Américas (C.E.M), puede brindar atención para luego canalizar a los hospitales designados.
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