El presidente Andrés Manuel López Obrador elevó el nivel en la lucha en contra del fentanilo, con la propuesta de prohibir la sustancia en México, para lo cual, pidió a médicos y científicos mexicanos que “analicen la posibilidad de que podamos sustituir el fentanilo con fines médicos por otros analgésicos para dejar de usarlo, a ver si es posible”.
“Antes se usaban otros analgésicos. Y entonces, aunque tenemos el control sobre el ingreso del fentanilo con usos médicos -que no se tenía antes-, de todas formas, al estar prohibido ya no habría ninguna posibilidad de que pudiese importarse y lo sustituimos por otros analgésicos”, dijo el mandatario.
López Obrador afirmó que, en caso de ser viable, se tendrá el compromiso de que “todo lo que entre de manera ilegal y por contrabando se va a seguir siendo combatido”, además de que pedirá a Estados Unidos que realicen las mismas acciones.
“Yo les voy a informar acerca del análisis y del resultado de esta propuesta. Queda abierta la convocatoria, el llamamiento para que los científicos, los médicos, puedan informarnos”, concluyó.
¿Qué es el fentanilo?
El fentanilo es un analgésico de origen opioide, como la codeína, la metadona, la morfina y la oxicodona. “Fue aprobado por primera vez por la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos, FDA, en 1968 y fue la década de 1970 cuando inició su uso ilícito”, recordó el Gobierno de México este miércoles, durante un video proyectado en la conferencia de prensa matutina del presidente.
Existe una gran variedad de presentaciones de fentanilo. Sin embargo, a pesar de la cantidad y diversidad, el propio fentanilo continúa dominando el suministro de opioides ilícitos en el mundo. “Miligramo por miligramo, el fentanilo es aproximadamente 50 veces más potente que la heroína y 100 veces más potente que la morfina”, explicó al sitio The Conversation, Kavita Babu, profesora de Medicina de Emergencia de UMass Chan Medical School, escuela de Medicina en Worcester, Massachusetts, Estados Unidos.
López Obrador insistió que es necesario “que no aumente el consumo” de fentanilo, ya que eso podría derivar en un incremento de la violencia en México. “Si nos aumenta el consumo nos aumenta la violencia, nos aumentan los homicidios”.
El presidente también insistió que en México “no tenemos un consumo elevado de fentanilo, sí de cristal, pero también muy localizado”, hecho que atribuyó a “nuestras tradiciones”. “Lo que hacen nuestras familias y por la manera como somos los mexicanos, no hay una actitud, una afición hacia las drogas. [Solamente] son ciertos lugares, que los tenemos muy claros”.
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Sin embargo, esta declaración contrasta con lo señalado el 31 de marzo de 2022 por Luis Cresencio Sandoval, secretario de la Defensa Nacional, quien advirtió del incremento en el consumo de drogas sintéticas en el país.
“Las drogas sintéticas tienen una tendencia al alza en su consumo, debido a su rápida adicción, un menor esfuerzo de producción y transporte, así como las ganancias son mayores para los grupos delictivos”, indicó el titular de la Sedena el 31 de marzo de 2022, indicando que habían sobrepasado a las drogas “tradicionales”.
Combate al fentanilo, vital para la relación entre México y Estados Unidos
La embajada de Estados Unidos en México destacó que el combate contra el fentanilo es una prioridad para el presidente Biden, en la cual México “es un socio crucial”.
En ese sentido, el Gobierno de México ha indicado que los decomisos de drogas sintéticas han aumentado significativamente respecto a los sexenios pasados. “Durante la actual administración se incrementó en 1049% los decomisos de fentanilo respecto al periodo 2014-2018; los de metanfetamina han incrementado 128% comparado con el periodo 2008-2012 y los de cocaína incrementaron 628% comparado con lo realizado entre 2008 y 2012. El desmantelamiento de laboratorios clandestinos ha aumentado 58% respecto al periodo 2008-2012 y tan solo de 2019 a 2022 se han asegurado mil 256 toneladas de precursores químicos de drogas”.
Por su parte, Estados Unidos señala que entre sus esfuerzos para atender esta situación está la propuesta presupuestal para el año fiscal 2023, que incluye 42 mil millones de dólares para esfuerzos de política de drogas para vencer la epidemia de sobredosis.
“A través del Plan de Rescate Estadounidense del presidente Biden invertimos cinco mil millones de dólares en servicios de adicción y salud mental, incluida una inversión histórica de 30 millones de dólares en reducción de daños”, destaca la embajada de Estados Unidos en México.
Además, en el primer año del Marco Bicentenario, “el gobierno del presidente Biden invirtió más de 25 mil millones de dólares en tratamientos para adicciones e interdicción de narcóticos ilícitos”.
Cascada de reacciones
La propuesta del presidente López Obrador detonó una serie de reacciones tanto de especialistas, gente relacionada con pacientes, opositores y usuarios de las redes en general.
