La vicepresidenta de Perú hace un llamamiento para la colaboración de Ecuador o Colombia
Repsol traslada su pesar por lo ocurrido y remarca que el incidente fue ocasionado por un «fenómeno marítimo imprevisible»
MADRID, 21 (EUROPA PRESS)
El presidente de Perú, Pedro Castillo, ha responsabilizado este jueves a la empresa Repsol del «desastre ecológico» provocado por el derrame de petróleo ocurrido el pasado sábado durante el proceso de descarga del buque ‘Mare Dorium’ a la refinería La Pampilla, frente a las costas de la capital, Lima.
«Aquí no podemos rehuir las responsabilidades, se trata de asumirlas y, en ese caso, de la empresa causante del desastre ecológico», ha recalcado el presidente Castillo durante una visita a la zona afectada.
«El daño ambiental que causan las empresas y las malas legislaciones tienen que ser frenadas», ha enfatizado Castillo, quien ha calificado lo ocurrido el pasado sábado como «el desastre ecológico más preocupante de la costa peruana de los últimos tiempos», según ha informado el diario oficial ‘El Peruano’.
En su visita al afectado distrito de Ventanilla, Castillo ha presentado la firma de un decreto para declarar de interés nacional la emergencia climática, y poder así poner en marcha de manera más eficaz medidas contra el calentamiento global.
«La ciudadanía debe saber que este gobierno tiene un genuino compromiso con la reducción de los efectos del cambio climático porque sabemos que, de seguir incrementando la temperatura media mundial, los afectados seremos cada uno de nosotros, sobre todo los hombres del campo», ha dicho.
Además, en un mensaje publicado en sus redes sociales, Castillo ha aseverado que, desde el Ejecutivo, «se han dispuesto las acciones penales, civiles y administrativas a fin de cautelar la soberanía y bienestar del país».
«El Gobierno asume el rol de sancionar a los responsables del daño que afecta trágicamente a la flora, fauna y a las comunidades puestas en peligro y privadas de su sustento cotidiano», ha señalado.
Unos 18.000 metros cuadrados de playa han sido afectados por el vertido de petróleo de al menos 6.000 barriles, una situación que, según ha defendido Repsol, ha sido causada por un «fenómeno marítimo imprevisible» a raíz de la erupción el pasado 15 de enero de un volcán en una isla de Tonga.
LLAMAMIENTO PARA EL APOYO INTERNACIONAL
Por otro lado, la vicepresidenta y ministra de Desarrollo e Inclusión Social de Perú, Dina Boluarte, ha hecho un llamamiento para el apoyo internacional ante el vertido de crudo en las costas del país.
«Convoquemos el apoyo internacional. Yo invoca a países como Venezuela o Ecuador, que tienen experiencias en temas de derrame de petróleo. Que miren al Perú y nos apoyen», ha expresado ante la prensa, recoge el diario ‘La República’.
Asimismo, se ha unido a las declaraciones de Castillo y ha aseverado que Repsol debe «asumir su responsabilidad». «No podemos ir matando la vida por el solo interés de seguir extrayendo los recursos de nuestro país», ha criticado.
RESPUESTA DE REPSOL
Por su parte, Repsol ha emitido un comunicado en el que ha reiterado que lo ocurrido fue provocado por un «fenómeno marítimo imprevisible» derivado de la erupción del volcán submarino de Tonga, y ha lamentado no haber logrado transmitir «de manera adecuada» sus compromisos y acciones para atender el desastre medioambiental.
«Nos gustaría transmitir especialmente nuestra solidaridad con todas las personas y poblaciones impactadas, y expresar un especial sentimiento por los entornos naturales y especies marinas afectadas», han señalado desde Repsol.
Así, ha enfatizado que, desde que se reportó el vertido de crudo, ha activado su «plan de contingencia» y ha desplegado «una serie de acciones» como el cierre de válvulas, el envío de un equipo de buzos a la zona, o el monitoreo «constante» de la situación.
Por otro lado, han remarcado que el equipo terrestre para acometer el derrame de petróleo en la costa es superior a 700 personas destinadas a las playas de Cavero, Bahía Blanca, Santa Rosa y Ancón.
Finalmente, Repsol ha agradecido a los colectivos sociales su colaboración para limpiar parte de las zonas más afectadas, así como a las autoridades, con las cuales han estado en «constante coordinación y comunicación» desde que se registró el incidente.
«Repsol ratifica su compromiso de continuar mitigando y remediando los efectos del derrame, así como a trabajar con las autoridades, la comunidad pesquera y a responder de manera más efectiva ante la ciudadanía con transparencia», ha zanjado.