SAN SALVADOR (AP) — La Asamblea Legislativa de El Salvador aprobó el martes la Ley Especial de Protección y Bienestar Animal que establece un control directo para evitar el abuso, maltrato y actos de crueldad contra los animales de compañía.
La normativa fue aprobada con los votos de 76 de los 84 diputados del Congreso unicameral. Los cuatro diputados del exguerrillero Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) no apoyaron la ley.
De igual forma, los diputados también derogaron una ley similar que supuestamente protegía a los animales, pero que dijeron que nunca funcionó
La normativa retoma muchas de las infracciones de una ley derogada y crea nuevas sanciones como la zoofilia, que es el contacto sexual de humanos con animales.
Los legisladores también desistieron de aprobar la reforma al Código Penal que creaba el delito de maltrato animal con penas de prisión de hasta cinco años, sustituibles por trabajos de utilidad pública. La iniciativa del presidente Nayib Bukele fue enviada a una comisión responsable de analizarla.
La decisión de aprobar esta ley surge debido a los recientes episodios de violencia contra los animales de compañía, como el caso de una familia que torturó a un perro lanzándole petardos y el caso de una persona que atropelló deliberadamente a un perro y se dio a la fuga
Los videos de los actos de crueldad en contra de animales se hicieron virales en redes sociales, provocando la indignación de mayoría de salvadoreños.
La nueva ley de protección y bienestar animal también ordena la creación del Instituto de Bienestar Animal (IBA), que emitirá las autorizaciones a los centros de crianza o resguardo de animales de compañía y silvestres y lo regulado por la presente ley.
«En esta ley se establece que el maltrato a los animales de compañía no será tolerado. Para ello, se han incorporado las infracciones con sus respectivas sanciones, dependiendo de la gravedad de la falta”, explicó el diputado Ricardo Rivas de la bancada oficialista del partido Nuevas Ideas.
En la ley queda establecido que la tenencia y cría de animales de compañía con fines comerciales está condicionado a las capacidades higiénicas y sanitarias, de alojamiento, a la ausencia de riesgos sanitarios y a la inexistencia de peligro, dijo la diputada Ivonne Hernandez, que ha luchado para proteger a los animales durante años.
Hernández denunció el caso de un hombre que resultó impune por la violación de un perro.
Los diputados aumentaron las multas que en la normativa derogada llegaban a 1.460 dólares y ahora alcanzarán los 3.650 dólares.
Como novedad, la ley obliga a los médicos veterinarios a reportar a la alcaldía de la localidad casos que se presentan en sus consultorios y que ameritan dar seguimiento por tener características de maltrato.