Sin importar el adversario, sin importar la competición, los jugadores del Chelsea están manteniendo su atención en la cancha en medio de un periodo turbulento para el club.
Lleva seis victorias seguidas desde que su propietario multimillonario ruso Roman Abramovich anunció que vendería al club londinense. El sábado, el Chelsea se impuso por 2-0 al Middlesbrough, de segunda categoría, y accedió a las semifinales de la Copa FA.
Romelu Lukaku y Hakim Ziyech marcaron los tantos de la primera mitad que fueron celebrados en una sección visitante más pequeña de lo habitual en el estadio Riverside. Luego de las sanciones económicas impuestas sobre Abramovich por parte del gobierno británico por sus vínculos cercanos con el presidente ruso Vladimir Putin tras la invasión rusa de Ucrania, el Chelsea sólo pudo llevar a unos 700 hinchas al partido en el noreste de Gran Bretaña.
La disparidad en las gradas no hizo ninguna diferencia, y las ambiciones del Middlesbrough de dar continuidad a las victorias sobre los equipos de la Liga Premier, el Manchester United y el Tottenham, en las rondas anteriores, se vieron rápidamente truncadas.
Y así llegó a su fin otra turbulenta semana para el Chelsea, que avanzó a la siguiente ronda de la Liga de Campeones el miércoles —ahora se medirá al Real Madrid en los cuartos de final_, antes de que el viernes finalizara el plazo para presentar ofertas para comprar el club a Abramovich y poner fin a sus 19 años de propiedad.
Mientras tanto en la Liga Premier, cada vez parece más probable que el Arsenal estará de regreso en la Liga de Campeones la próxima temporada.
Una victoria por 1-0 sobre el Aston Villa colocó al Arsenal a cuatro puntos de distancia del quinto sitio Manchester United en la contienda para terminar en los primeros cuatro sitios de la Premier. Además, el Arsenal tiene un partido menos.
Bukayo Saka anotó el tanto de la victoria a los 30 minutos, para registrar su noveno gol en esta campaña, al enganchar un balón que fue débilmente despejado por la defensa del Villa y lanzar un tiro raso de primera intención que superó al desprevenido portero Emiliano Martínez desde el borde del área.
El Arsenal tuvo el control durante gran parte del partido, pese al poco tiempo que transcurrió desde su derrota ante el Liverpool el miércoles por la noche, un calendario que había molestado al técnico Mikel Arteta.
“Creo que el equipo mostró hoy mucha personalidad para venir y jugar de la forma en la que lo hizo”, señaló Arteta. “Dominamos el partido”.
Esta temporada es la primera en un cuarto de siglo que el Arsenal no participa en una competición europea.
