MADRID, 1 (EUROPA PRESS)
El robo ocurrió sobre las 2 de la madrugada del día 30. El jugador madridista ni su familia estaba en el domicilio, pero sí personas de servicio, que llamaron a los vigilantes de seguridad, que llegaron a la Guardia Civil. Las cámaras infrarrojas ya habían detectaron la presencia de los dos intrusos cuando saltaron la valla y entraron a la zona ajardinada.
Cuando llegaron los agentes, los presuntos ladrones ya se habían marchado sin llevarse nada al advertir que las cámaras les habían pillado, adelantó el diario El Confidencial. Al revisarlas, corroboraron lo sucedido ante la presencia del futbolista, que denunció al día siguiente los hechos ante el cuartel de la Guardia Civil de Boadilla. De momento, no hay detenidos.
