LONDRES (AP) — Helicópteros y barcos de rescate acudieron el miércoles al Canal de la Mancha, cerca de la costa de Kent, en el sur de Inglaterra, para rescatar a los pasajeros de una pequeña embarcación que naufragó en aguas gélidas, hecho en el que murieron cuatro personas.
En una comparecencia ante el Parlamento, el primer ministro, Rishi Sunak, confirmó que había víctimas mortales, pero no dio detalles. Se esperaba que la secretaria de Interior, Suella Braverman, informara a la Cámara de los Comunes más tarde el miércoles.
Tras una operación de búsqueda y rescate coordinada por la Guardia Costera, lamentamos informar que hubo cuatro muertes confirmadas como resultado de este incidente. Las investigaciones continúan y daremos mayor información oportunamente", dijo el gobierno en un comunicado. “Este es un incidente verdaderamente trágico”.
Los guardacostas británicos coordinaban una operación de rescate que implicaba a la Marina, agentes fronterizos y la policía de Kent. También la Institución Nacional de Barcos de Rescate envió barcos.
El servicio de ambulancias de la costa sureste del país dijo haber enviado ayuda a las 3:40 de la madrugada para ayudar a la Guardia Costera.
Miles de migrantes utilizan cada año pequeño botes con la esperanza de cruzar el canal para pedir asilo en Gran Bretaña. El gobierno británico se ha visto presionado para impedir que la gente pague a contrabandistas para cruzar una de las rutas navieras más transitadas del mundo en endebles embarcaciones.
Sin embargo, el número de personas que deciden hacer la peligrosa travesía sigue subiendo. En lo que va de año, unas 44.000 personas completaron el viaje, en comparación con las 23.000 del año pasado y las 8.500 de 2020, según cifras del gobierno.
Sunak prometió el martes procesar los casos acumulados de solicitantes de asilo y anunció nuevas medidas para reducir el número de migrantes que llegan a Gran Bretaña cruzando el Canal.
Sunak dijo que tenía previsto presentar legislación a principios del año que viene para garantizar que la gente que llega de forma ilegal no puede permanecer en el país.
El primer ministro dijo que añadiría cientos de trabajadores para tramitar las solicitudes de asilo y acabar con los casos acumulados, que estima superan los 143.000, para el final de 2023. El personal adicional también se centrará en la expulsión rápida de migrantes albaneses, cada vez más numerosos entre los que atraviesan el Canal, según Sunak.