BRUSELAS, 5 (EUROPA PRESS)
"Demasiados gitanos siguen sin disfrutar de igualdad de acceso a la educación, al empleo, a la asistencia sanitaria o a la vivienda", alertan en una declaración conjunta la vicepresidenta encargada de Estado de derecho, Vera Jourová; la comisaria de Igualdad, Helena Dalli; y el comisario de Vecindad y Ampliación, Olivér Várhelyi.
Con motivo de la conmemoración este sábado del Día Internacional del Pueblo Gitano, los responsables comunitarios quieren con este escrito "rendir homenaje a la minoría europea más numerosa" y reivindicar la necesidad de " trabajar juntos a escala local, nacional y regional, siempre en colaboración con los gitanos, para que alcancen una igualdad real en su vida cotidiana".
"Rendimos homenaje a su diversidad, lengua, arte y cultura, y a su contribución a la historia de Europa", dicen Jourova, Dalli y Várhelyi, quienes apuntan "avances alentadores" en algunos Estados miembro y países vecinos que "combaten activamente el antigitanismo", aunque advierten de que no se está avanzando al ritmo deseado.
"Pedimos a la UE y a los países candidatos que apliquen todas las medidas del Marco Estratégico Europeo para la Población Gitana y que intensifiquen sus esfuerzos de lucha contra el antigitanismo y los estereotipos antigitanos", señala la declaración conjunta.
En este sentido, los responsables comunitarios apelan a la unidad para crear una "cultura de apoyo e inclusión", que además reconozca la contribución de la población gitana al patrimonio cultural europeo.
Así, ponen como ejemplo la colaboración con el Consejo de Europa, órgano ajeno a la UE, para poner en marcha el proyecto Equirom contra los estereotipos sobre la población gitana en los medios de comunicación. "Queremos crear un relato positivo, centrándonos concretamente en las mujeres y los jóvenes gitanos, y difundir la cultura de la población gitana y su historia, incluido el Holocausto Gitano", han explicado.
Según recuerda Bruselas, la población gitana representa la mayor minoría étnica de Europa, con una población de entre diez y doce millones de personas, de las que más de seis millones viven en países de la UE y otros cuatro en los países candidatos a la adhesión (Balcanes Occidentales, Turquía, Ucrania, Moldavia y Georgia).