MADRID, 11 (EUROPA PRESS)
La ONU ha restringido desde hace varias semanas el trabajo presencial de todos sus empleados, tanto hombres como mujeres, a la espera de examinar los efectos de un veto que "es ilegal" en virtud del Derecho Internacional. El proceso de revisión se prolongará hasta el 5 de mayo.
Con él, "las autoridades talibán 'de facto' buscan forzar a Naciones Unidas a tomar una decisión terrible entre quedarse y seguir dando apoyo al pueblo afgano o ceñirse a las normas y principios que estamos obligados a respetar", ha explicado la misión en Afganistán (UNAMA).
La ONU ha querido dejar "claro" que "cualquier consecuencia negativa" de las medidas "discriminatorias" contra las mujeres serán "responsabilidad" exclusiva de los talibán, que desde su vuelta al poder en agosto de 2021 han restringido el margen de movilidad y actividades de la población femenina.
La población vive "un sufrimiento sin precedentes", según la ONU, que considera su trabajo en Afganistán vital para "salvar vidas". Más de 28 millones de personas, alrededor de dos terceras partes de la población afgana, necesitan ayuda humanitaria urgente.