Las mujeres requieren 80% más recursos para su retiro laboral o jubilación y, al menos, seis de cada 10 corren el riesgo de vivir una vejez de pobreza y dependencia al dinero de los programas sociales o de la buena voluntad de sus hijos y familiares.
Un estudio de Citibanamex Afore reveló que ellas “requieren 80% más recursos para mantenerse durante los años posteriores a su retiro que un hombre, por el simple hecho de que es posible que viva más años”.
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Reportó que, de acuerdo con el Inegi, la esperanza de vida promedio en México es de 72.3 años para los hombres y 78.6 años para las mujeres; lo que implica que –al cumplir la edad de retiro de 65 años– ellas necesitan financiar un mínimo de 13.6 años de vejez, contra 7.3 años de los hombres.
Ello significa que las mujeres requieren financiar 6.3 años adicionales de gastos y manutención respecto a los hombres, después de la jubilación; cifra que es equivalente a un periodo adicional de recursos económicos de 86.3%, respecto al que ellos requieren.
De no contar con los recursos suficientes, las mayoría sería dependiente de las transferencias del gobierno, a través de los programas sociales como la pensión universal para adultos mayores o del apoyo que sus familiares puedan o quieran aportarles.
Mujeres tienen menos ahorro de retiro
La Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar) reportó que saldo pensionario –o tamaño del ahorro para el retiro– de las trabajadoras del país es 25% menor al de los hombres.
Precisó que, con base en el total de cuentas y los saldos de ahorro administrados por las Afores, al cierre de julio de 2023, se estima que los varones podrán acumular un saldo pensionario 14.7% más alto que las mujeres.
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Esto último tiene un impacto muy negativo para las trabajadoras, debido a que por cada 100 pesos que un hombre ahorra en su cuenta individual de la Afore, una mujer apenas acumula 87.2 pesos.
Por si fuera poco, el reporte de Citibanamex Afore advirtió que la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) reveló que 42.27% de las mujeres afirmó ganar un salario mínimo o menos, en contraste con el 28.24% de los hombres que se encuentra en esta situación.
Además de que la tasa de informalidad fue más alta para las mujeres, con un 54.8%, frente a un nivel de 48.7% de los hombres; datos que anticipan que 55 de cada 100 mexicanas ocupadas no ahorran para su retiro o vejez y, por lo tanto no tendrán acceso a una pensión formal.
Tres preguntas a…
Irma Olivia Pérez Cancino, especialista en Finanzas y docente de la Escuela Bancaria y Comercial (EBC), campus Chiapas:
1. ¿Qué impacto económico tiene el dato de Citibanamex Afore que advierte que las mujeres necesitan 80% más recursos para su retiro o vejez?
Este dato destaca las disparidades de género en el ámbito económico y financiero, y tiene varias implicaciones económicas y sociales para las mujeres como la brecha de ingresos: las mujeres a menudo enfrentan salarios más bajos, interrupciones en sus carreras debido a embarazos, lactancia, labores de cuidado y responsabilidades familiares.
Además de una fuerte dependencia económica, derivada de la falta de ahorro suficiente para la jubilación, que aumenta la vulnerabilidad económica de las mujeres mayores, especialmente, si no tienen acceso a redes de apoyo social o familiar; lo que puede llevar a una mayor dependencia de las pensiones gubernamentales o de otras fuentes de ingresos como programas sociales.
2. Si 55% de las mujeres trabaja en la informalidad y su participación en la economía es de 43%, ¿esto significa que la mayoría vivirá en pobreza y a expensas de familiares o programas sociales en su vejez?
– En efecto, muchas mujeres podrían enfrentar desafíos económicos considerables durante su vejez. La informalidad a menudo se asocia con la falta de beneficios laborales como la seguridad social y acceso limitado a sistemas de ahorro para la jubilación.
Al tener en cuenta que una proporción de mujeres trabaja en la informalidad y su participación en la economía formal es baja, muchas de ellas tienen ingresos más bajos y ahorros limitados, aumentando la probabilidad de que vivan en condiciones de pobreza durante su vejez y dependan de familiares o programas sociales para satisfacer sus necesidades básicas.
3. ¿Para las familias, dicha situación representa una carga económica?
– Por supuesto que sí, las mujeres desempeñamos un papel crucial en el sostenimiento de las familias, ya sea que estemos en la informalidad laboral, participando con una economía limitada o que tengamos el acceso a fuentes formales de trabajo. Cuando se presente la vejez, esto se verá reflejado y se podría tornar en una inestabilidad financiera y familiar.
Al haber una fluctuación de los ingresos y ser menos predecibles, dificulta la planificación financiera a largo plazo. Los problemas financieros pueden contribuir a tensiones en las relaciones familiares y afectar negativamente la calidad de vida de sus miembros.
Cifras y expectativas de retiro para mujeres
Las encuestas de la Asociación Mexicana de Afores (Amafore) e Inegi reportaron que:
- 73% de las mujeres piensan que sus hijos o familiares las mantendrán durante su vejez.
- 24% señala que hará frente a vejez con sus ahorros o pensión.
- 3% solo a través de las transferencias del gobierno o programas sociales.
- 42.67% de las cuentas de ahorro para el retiro, administradas por las Afores, son de mujeres, contra 57.3% de los hombres.
- 43% de las mujeres en edad de trabajar, de 15 años o más, son económicamente activas.
- 57% no ahorra ni tiene un fondo que le permita enfrentar los gastos de la vejez.
