El jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Martí Batres Guadarrama, negó que existiera una emergencia hídrica en la capital por la sequía y los bajos niveles que registran las presas del Sistema Cutzamala, y acusó a la oposición de crear la emergencia por “tener “una fuerte sequía de votos”.
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A pesar de que en los últimos meses se ha reportado escasez y recortes de agua en el suministro por la sequía que atraviesa la CDMX y gran parte del país –incluyendo las zonas en las que se ubican las presas del Cutzamala– el mandatario capitalino aseguró que el suministro de agua estaba garantizado en la capital.
“El tema del agua se trabaja bien en la Ciudad de México y, como he señalado, está garantizado el servicio de agua potable y el abasto de agua potable en el corto, mediano y largo plazo”, sostuvo al ser cuestionado en el marco de su visita a la planta solar fotovoltaica de la Central de Abasto.
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Batres Guadarrama aprovechó para arremeter contra los políticos de oposición, los llamó farsantes e hizo referencia a la investigación de corrupción inmobiliaria que lleva a cabo la fiscalía capitalina, y en la cual se señala a diversos exfuncionarios del Partido Acción Nacional (PAN) en la alcaldía Benito Juárez.
“Yo les diría que no sean farsantes, porque si estuvieran realmente preocupados por el tema del agua, no estarían autorizando pisos y pisos y pisos y pisos ilegales en las alcaldías que gobiernan, particularmente en Benito Juárez. Nada más en Benito Juárez han autorizado tantos pisos como los que tiene la torre más alta de Dubái”, aseveró.
Asimismo, Batres recriminó a los legisladores locales del PAN, pues recordó que hace seis meses envió una iniciativa al Congreso de la Ciudad de México sobre un sistema de captación pluvial que sigue detenido en comisiones. “Está en las comisiones que preside el PAN en el Congreso de la Ciudad de México y no la han aprobado. (…) Quiero ver que la aprueben, a ver si es cierto que tienen interés en el tema”, concluyó.