El gobierno de Estados Unidos aprobó un aumento de 25% a 100% en los aranceles que pagan los autos eléctricos provenientes de China, que ingresen al mercado estadounidense.
Lo anterior como parte de un paquete de impuestos a la importación de varios productos provenientes del país asiático, cuya aplicación alcanzará un valor de 18 mil millones de dólares.
El presidente Joe Biden, explicó que la imposición de dichas medidas arancelarias –que entrarán en vigor entre 2025 y 2026– son un “asunto vital para el futuro económico y la seguridad nacional de Estados Unidos”.
Por ello, anunció que –además de los autos eléctricos– se aplicarán aranceles a los productos chinos como el acero, aluminio, semiconductores, baterías, paneles solares, grúas de descarga de buques y productos médicos.
Autos, los más castigados
De acuerdo con el anuncio del presidente Biden, la aplicación de aranceles de 100% a los automóviles eléctricos de China tiene como objetivo frenar el incremento de 70% que registraron las importaciones de esos vehículos en 2023.
Además de impulsar la producción de tales unidades desde las plantas automotrices estadounidenses y, con ello, lograr que en dos tercios de los nuevos coches, vendidos en su país sean eléctricos para 2032.
Cabe recordar que a finales de marzo de este año, el candidato republicano a la presidencia de EU, Donald Trump, ya había amenazado con aplicar una arancel 100% a los coches chinos, particularmente a los fabricados en México.
“A esas grandes, monstruosas plantas de fabricación de autos que están construyendo en México en este momento y con las que creen que se van a salir con la suya al no contratar a estadounidenses y vendernos los autos…
“Les vamos a imponer un arancel del 100% (a los autos chinos)”, dijo Donald Trump durante un discurso de campaña realizado en la ciudad de Dayton, Ohio.
